FRATELLI DELLA SACRA FAMIGLIA
CASA DI PROCURA
GENERALIZIA
Roma, 10 - 12 – 2013
“y habitó entre nosotros” (Juan 1,14-15).
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, Aspirantes a
Hermanos, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas, Catequistas y amigos
de la familia Sa-Fa:
La fiesta de la Navidad nos introduce en la
intimidad de la Sagrada Familia y nos evoca las actitudes de Jesús, María y
José ante el misterio divino. Los signos que acompañan el nacimiento de Jesús
son tan normales que solo por la fe se llega a descubrir al Dios hecho Niño y a
aceptar que pueden ocurrir cosas extraordinarias cuando actúa Dios. En el
mensaje de este año vamos a fijarnos en algunas evocaciones que me sugieren
Jesús, María y José en la escena navideña.
El tiempo de Navidad es el momento oportuno para empezar
a estudiar y actuar el mensaje de nuestro Capitulo: "Bajó con ellos y vino a Nazaret y vivía sujeto a ellos" (cfr. Lc
2,51). Estas palabras del Evangelio, tan queridas para nuestra espiritualidad
nazarena, han guiado e iluminado los trabajos de nuestro XXXVII Capítulo
General. Constituyen también la puerta de entrada el Proyecto de Vida y la
clave de lectura para comprender en profundidad su sentido y asumir su mensaje
con alegría y responsabilidad”.
Hacernos como el Niño
El hecho de que Dios se haga niño y necesite de unos
padres para sobrevivir nos acerca a nuestra identidad de hijos. Desde aquí
hemos de entender sus palabras: «Yo os
aseguro que si no os hacéis como niños no entraréis en el Reino de los Cielos»
(Mt 18,3). Es increíble que la pequeñez y la vulnerabilidad sean las tarjetas
de visita de Dios. El nacimiento de Jesús nos acerca al misterio de la
encarnación, uno de los misterios más importantes de la vida cristiana.
“La
"bajada" de Jesús a Nazaret es el símbolo del misterio de su encarnación.
En el taller de Nazaret el Hijo de Dios aprende a hacerse humano. Su
encarnación se lleva a cabo progresivamente por un camino de inculturación: en
la aldea de Nazaret se hace judío, hijo de José y de María. Lo infinito de Dios
acepta expresarse en la finitud humana”. (Capítulo
General)
En diversos evangelios Jesús habla de los niños y
les hace protagonistas de sus parábolas. El niño es un ser débil y humilde
capaz de dejarse sorprender, abierto a lo que venga, sin prejuicios, que no
posee nada, que no tiene ambición, que no conoce la envidia, que no busca
puestos privilegiados y que no tiene nada que decir. El niño tiene conciencia de su pequeñez y
debilidad. Quizás por esto emociona sentir que Jesús fue un niño como nosotros.
Celebrar la Navidad nos recuerda que el camino de la
sencillez y la humildad de espíritu es requisito
indispensable para llegar al reino de los Cielos. Por ello honrar y reverenciar
el nacimiento de Jesús nos acerca a nuestras raíces y a nuestro modo concreto
de realizarnos como cristianos. En este sentido, el 37 Capítulo General nos
recuerda que “la encarnación de Jesús nos
debe llevar a inculturarnos evangélicamente en el desarrollo de la misión para
que el carisma recibido sea una buena noticia en el corazón de las culturas”.
Acompañar con María al Niño
“ La red
relacional de Jesús empieza en el seno materno, que “da forma” a su humanidad.
Se establece así una reciprocidad: Jesús se hace hombre gracias a sus padres, y
sus padres renacen a ellos mismos, gracias a Jesús. Es el misterio de un
engendramiento mutuo, reflejo en la humanidad del misterio de la vida
trinitaria”. (Capítulo General)
En el misterio de la Navidad, María nos entrega a su
hijo Jesús. Un Niño que despierta en el corazón humano anhelos de paz y de
reconciliación. El Niño Jesús nos señala las actitudes propias de los niños tan
importantes para la vida cristiana: la alegría, la inocencia, la confianza, la
bondad, la ternura y en especial la docilidad al Plan del Padre.
María en el momento histórico de la Anunciación
responde con disponibilidad total: “Hágase
en mí según tu palabra”. Es un diálogo fecundo de abandono, confianza y de
armonía con la voluntad del Padre. Ante la llamada del Ángel, María no se mira
a sí misma, se fía de Dios y comprende que su vocación está en función de los
demás. Es una vocación que se desarrolla, se modifica y se enriquece por
caminos no siempre previstos ni comprendidos.
Con María especialmente en el tiempo de la Navidad
estamos invitados a volver a fortalecer nuestra vocación cristiana en diálogo
fecundo con el Niño Dios. María, con su vida de fe y testimonio de
disponibilidad y de servicio, es para nosotros un ejemplo de cómo vivir cada
una de nuestras vocaciones viviendo con confianza en el momento presente las
circunstancias que nos ofrece el día a día.
Seguir con José al Niño
“Jesús se ha
hecho un ser humano porque ha aprendido a hacer de su vida una sumisión, un don
para la vida de los demás. El amor ha sido el factor de humanización del Hijo
de Dios, el secreto de su “formación”. “Respetarlo”, honrarlo y seguirlo
significa asumir en nuestra vida personal y comunitaria su misma actitud: hacer
de nuestra vida de Hermanos una sumisión mutua, una ofrenda para la vida de los
otros, sobre todo de los más pequeños y de los más pobres”.
(Capítulo General)
De José poco dicen las Escrituras. El silencio
envuelve su persona. Es el silencio de la primacía de la vida interior que
contempla desde el corazón la vida y la manera que Dios tiene de pasar por
ella. Es por lo tanto un silencio elocuente que habla sin palabras y que
encierra todo un estilo de hacer misión viviendo la cotidianidad con una gran
fe en la Providencia.
Incluso en los momentos difíciles, el humilde
carpintero de Nazaret, nunca se arroga el derecho de poner en discusión el
proyecto de Dios. Espera la llamada de lo Alto y en silencio respeta el
misterio, dejándose guiar por el Señor. Modelo de vida de fe para los
creyentes, San José es llamado “hombre justo” (Mateo 1,19). El adjetivo “justo”
evoca su rectitud moral, el sincero apego a la práctica de la ley y la actitud
de total aceptación y apertura a la voluntad del Padre celestial.
José elige para su vida “la voluntad” de
Dios. Esposo atento y fiel al servicio de su familia, escucha, obedece y
actúa. Se pone “al lado” de María y de la debilidad del Niño Dios. Al hablar de
la Navidad, recordemos la huella que San José dejó en Jesús. De hecho el que
Cristo haya sido carpintero, se debió a que era el oficio de San José. A
ejemplo de San José reconozcamos al Niño Dios, creamos en Él y adorémoslo en la
cuna.
Un vez más, en Navidad, Dios se nos manifiesta en lo
tierno, en lo humilde y en lo sencillo y nos invita a beber en la fuente de la
inocencia y de la bondad. El nacimiento de Jesús nos
estimula a acoger con agradecimiento la Palabra de vida y a comunicarla con
gozo y agradecimiento.
Que esta Navidad evoque en nosotros aquel niño que
fuimos y al Niño que nos trae la salvación.
Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo. H. Juan
Andrés Martos Moro SG
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PROCURA GENERALIZIA
Roma, 24-11-2013
"La fe era el
principio y norte de todas las acciones y empresas del Venerable Hermano
Gabriel Taborin y la oración su fuente y recurso" (Testimonio del Hermano Amadeo Depernex, sucesor del
Hermano Gabriel)
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas,
Aspirantes a Hermanos, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas,
Catequistas y amigos de la familia Safa:
La clausura del Año de la fe el 24 de
noviembre de 2013, oportuna coincidencia con la conmemoración de la fiesta de
nuestro Fundador, me lleva a sugerir en el mensaje
de este año algunas ideas sobre la vivencia de la virtud de la fe del Venerable
Hermano Gabriel con el deseo de que todos los miembros de la Familia Sa-Fa acrecentemos
nuestra cercanía con el Señor.
En
el Perfil Espiritual del Hermano Gabriel, (Sumarium), se lee que “Quienes le conocieron no dudan en afirmar
que la fe de nuestro Fundador era su virtud característica, la que guiaba su
conducta, alentaba su vida e iluminaba sus acciones. Su fe se manifestaba sobre
todo en los momentos difíciles y en las pruebas, en la calumnia, en la pobreza
extrema y cuando el alma podía dudar de la misericordia de Dios. Su actitud de
fe le hacía ver la mano de Dios en cualquier acontecimiento que supera lo
humano. La vivencia de esta virtud fue rica en obras”.
Pues bien, en esta ocasión, al concluir
el “Año de la fe” y celebrar la fiesta de nuestro Fundador, os invito a considerar
el modo peculiar de vivir la fe del Hermano Gabriel en las circunstancias de su
vida en las que sobresalen tres miradas muy concretas para entender tanto su
historia personal como el mundo que le rodea.
Una mirada contemplativa que le hizo entender
la vida, los acontecimientos y la historia como lugares de la manifestación de
Dios. Actitud, que a la luz de la fe, le ayudó a descubrir a Dios en la
naturaleza, en las circunstancias sociales y eclesiales, en la Eucaristía, en
el Sagrario y en la vida de las personas, en especial, las más necesitadas.
Una mirada compasiva y de misericordia, llena
de sensibilidad ante las carencias humanas lo que le llevó a un exigente y
constante compromiso desde su fe. Actitud que desde la espiritualidad nazarena
le impulsó a realizar su misión con “un celo
ardiente para educar cristianamente a la juventud y ayudar a los sacerdotes”.
Y una mirada confiada en el amor de Dios
que le llevó a abandonarse en sus manos y a decir que “si esta es obra mía perecerá pero si es obra de Dios Él sabrá
sostenerla”, a pesar de los fracasos, las deserciones e inconvenientes que
le pusieron a prueba.
Su manera peculiar de
vivir la fe no fue tanto un esfuerzo por encontrar a Dios sino un dejarse
encontrar por Él, una experiencia como la que se narra en el libro de los Reyes
(1 Re 19,11-13) referida al profeta Elías: “Pasó antes del Señor un viento huracanado,
que agrietaba los montes y rompía los peñascos: en el viento no estaba el
Señor. Vino después un terremoto, y en el terremoto no estaba el Señor. Después
vino un fuego, y en el fuego no estaba el Señor. Después se escuchó la voz de
una brisa tenue y allí estaba el Señor.”
De igual manera cada uno de nosotros desde
la experiencia de “encuentro con el Señor
en la brisa tenue de nuestra cotidianidad”, clave de
nuestra espiritualidad Sa-Fa, estamos llamados a manifestarlo en los gestos
simples de cada día y en las circunstancias que nos toque vivir y a proclamarlo
en nuestras parroquias, colegios, lugares de trabajo, casas y en nuestras
familias.
Así pues, al finalizar el Año de la fe, coincidiendo con
el ciento cuarenta y nueve aniversario de la muerte del Hermano Gabriel, invito
a todos a fortalecer nuestra comunión con Dios y por sugerencia de nuestro 37
Capítulo General a “Aceptar y acoger al
diferente con una mirada de fe, asumiendo las nuevas realidades de la sociedad
que nos desafían y humanizan”. Estimulados por el ejemplo de nuestro
Fundador hagamos memoria de su persona recordándolo en el día de su fiesta como:
-
Un hombre de fe que contempla el mundo desde la presencia de Dios;
-
Un hermano que cuida de sus hermanos con un corazón paterno y materno, creador
de comunión y lleno
de vigor y de afecto.
-
Un acompañante espiritual que escucha y acoge a las personas, que se pone al
servicio del otro y que
favorece las relaciones de amistad y de reciprocidad.
-
Un educador, con corazón de apóstol, amigo de los niños y de los jóvenes, que
sabe estar presente con
exigencia y creatividad y al mismo tiempo ser
misericordioso.
-
Una persona apasionada que ve más allá de su época, que tiene proyectos que traspasan
las fronteras y
que vive los ideales apostólicos con una fuerte inquietud
misionera.
Damos
gracias al Señor por la herencia de nuestro Fundador y por tantas personas de
la familia Sa-Fa que de forma discreta y silenciosa, desde una fe de discípulos
y misioneros, se esfuerzan por vivir e irradiar el carisma del Instituto.
¡Feliz fiesta!
Frère
Juan Andrés Martos Moro S.G
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Viale Aurelio Saffi, 24 – 00152 ROMA
Tel. 06 581 38 41 Fax 06 588 09 13
CARTA DEL HERMANO SUPERIOR GENERAL N. 11
(En camino hacia el 37º Capítulo General)
Estamos
convencidos de que en esta circunstancia del Capítulo General, como en tantas
otras la mano de Dios actúa en él, esto nos da una nueva prueba de que el
Instituto es más obra de Dios que de los hombres. (Acta de aprobación del primer Capítulo General, NG)
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas,
Aspirantes a Hermanos, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas,
Catequistas y amigos de la Familia Sa-Fa:
Tras la convocatoria oficial del pasado 16 de junio,
nos estamos encaminando hacia la celebración del 37º Capítulo General,
acontecimiento que sin duda marcará espiritualmente la vida del Instituto para
el próximo sexenio. Una
vez más os invito a considerar
este acontecimiento como una nueva etapa en la vida de la Congregación que nos
pide una constante renovación espiritual y pastoral para responder al proyecto
de Dios sobre nuestro Instituto y ofrecer un mejor servicio a la sociedad y a la
Iglesia.
Deseo que el material
enviado ya a las Comunidades, Fraternidades y grupos Sa-Fa para la reflexión
personal y comunitaria nos ayude, a través de los interrogantes que nos vayamos
haciendo, a prepararnos para celebrar dicho acontecimiento. Compartir el fruto de
nuestras reflexiones servirá sin duda para conocer mejor nuestros deseos y
decepciones y para abrirnos a la belleza de nuestro carisma. Conviene
también recordar que todo Capítulo General es una nueva oportunidad para que
cada uno de nosotros evalúe su propia vida y discierna lo que el Señor nos está
pidiendo en este momento de la historia.
El tiempo que estamos viviendo como
Congregación en la proximidad del Capítulo General debe ser una ocasión
propicia para dar novedad a la vida y misión de toda la Familia Sa-Fa, convencidos
de que la vida y la misión son dones que tenemos que compartir. Se trata de
un desafío que nos pide extraer enseñanzas nuevas y antiguas del precioso
tesoro de la Iglesia, de la vida religiosa y laical, de nuestro Instituto, de
nuestra tradición y de las situaciones de nuestro mundo.
Ante los desafíos de nuestro tiempo Jesús
nos dice: «Yo estoy con vosotros» (cf. Mt 28,20). Esta certeza nos
ayudará a considerar el Capítulo como un tiempo privilegiado de gracia y de
intensa acción del Espíritu, en definitiva, un acontecimiento salvífico del
Señor que se introduce en la historia de nuestra familia religiosa para seguir
realizando la obra de la redención.
Impulsados por la acción del Espíritu
seremos “sal de la tierra y luz del mundo” (cf. Mt 5, 13-14), pero si en
nosotros domina el espíritu del mundo nuestra sal ya no servirá y será
pisoteada por la gente” (Mt 5, 13). Así pues, necesitamos romper con todo lo
que en nuestra familia Sa-Fa sea obstáculo para avanzar en nuestro seguimiento
de Cristo bajo la intuición del Hermano Gabriel y necesitamos también la luz del
Espíritu para interpretar la actualidad de nuestro carisma en el contexto de
los desafíos presentes. Cada Capítulo es una llamada a la corresponsabilidad
y a reavivar la llama de nuestro carisma.
1. El Capítulo General, un camino para toda la
Familia Sa-Fa
Para los miembros de la
Familia Sa-Fa que no conozcan bien el vocabulario de la Congregación,
recordemos que un Capítulo General reúne, cada seis años, a delegados
procedentes de todo el Instituto para dar orientaciones adaptadas a nuestro
tiempo, legislar si fuere preciso y proceder a la elección del Superior General
y cuatro Hermanos Consejeros.
Nuestras Constituciones señalan en el Nº 239 que “órgano
supremo de la Congregación”, el Capítulo General tiene entre otras
responsabilidades:
a) Mantener el patrimonio
espiritual, es decir, la naturaleza, la misión, el espíritu, la espiritualidad y
las sanas tradiciones del Instituto, así como el pensamiento auténtico del
Fundador.
b) Promover, en conformidad
con este patrimonio, la renovación de la vida religiosa en el Instituto y su
adaptación a tiempos y lugares, permaneciendo fiel a su identidad y a su misión.
c) Animar el fervor de la
caridad; mantener en el Instituto la unión comunitaria y el impulso del carisma
propio.
d) Tomar conciencia de
las llamadas que el Señor dirige al Instituto a través de las orientaciones de
la Iglesia y de la evolución del mundo.
e) Asegurar la fidelidad
del Instituto a la Iglesia, su colaboración con la jerarquía y la observancia
del derecho universal.
f) Promover con medidas
oportunas el bien común y la acción apostólica.
g) Resolver en última
instancia, los problemas que afecten a todo el Instituto. En este sentido,
recibe y examina las proposiciones individuales y colectivas de los Hermanos y
de las comunidades, que siempre pueden enviar libremente sus deseos y
sugerencias al Capítulo General”.
Contempladas estas
responsabilidades podemos decir que el Capítulo General incumbe a todos los
Hermanos y también a todos los hombres y mujeres seglares que tienen un corazón
y una mente Sa-Fa para quienes no ha de ser indiferente el tipo de vida que se
impulse desde el Capítulo. Tampoco es indiferente la actitud que Hermanos y seglares mostremos
ante el Capítulo General ni la disponibilidad para vivir nuestras respectivas
vocaciones al servicio especialmente de los niños y jóvenes en nuestra misión.
Así pues, el Capítulo
General atañe a toda la Familia Sa-Fa y por lo tanto es de todos, aunque la
participación directa sea limitada por necesidad. Nuestro valor en la Familia Sa-Fa no
depende de la tarea que ejerzamos ni del puesto que ocupemos, sino más bien de
nuestro estilo de vivir el mismo carisma y de ser auténticos seguidores del
Hermano Gabriel.
En la lógica del Espíritu, sólo el Señor
conoce quién puede ayudar en mayor medida al buen resultado del Capítulo y tal
vez tanto como los mismos capitulares participantes podrán contribuir a sus
buenos frutos aquellos hermanos y laicos de la Familia Sa-Fa que aman
profundamente a la Congregación, que viven de modo coherente y entusiasta el
ejercicio de su vocación y que rezan con fe por el futuro de la Congregación.
No obstante, un Capítulo General no se
desarrolla en una cámara de vacío. Los hechos que acontecen en la sociedad y
dentro de la Iglesia deben influir en la dinámica de las sesiones y en la
propia temática que han de abordar los capitulares. La sugerencia de que
nuestro Capítulo afronte el tema de la “inculturación y de la nueva
evangelización” no remplaza el objetivo fundamental de todo Capítulo cual
es el de analizar la vida y obra del Instituto en el momento presente.
Ahora bien, frente a la
complejidad y amplitud de la tarea, posiblemente sean pocas y frágiles las
respuestas que ofrezca nuestro Capítulo por lo que debemos asumir la limitación
de soluciones parciales y aceptar los riesgos de nuestras orientaciones. Lo más importante es que
sepamos enfocar adecuadamente las cuestiones vitales conscientes de que se hace
camino al andar. Así pues, tenemos que vencer nuestros recelos si queremos que
este Capítulo nos sorprenda, nos inspire con sus decisiones, nos remueva
interiormente con los retos a asumir y nos impulse a dar lo mejor de nosotros
mismos.
El Sínodo de los Obispos sobre la “Nueva
Evangelización” nos ha invitado a que abramos el corazón y los ojos a la
realidad del mundo actual y a evaluar la capacidad de animación que tiene el
actual modo de evangelizar. El “Año de la Fe” y la “Nueva
Evangelización”, núcleos recurrentes en la Iglesia de hoy pueden ser dos
temas que nos acompañen en nuestras tareas capitulares como lo fue la nube
luminosa que custodió al pueblo de Israel hacia la tierra prometida. Dos
eventos que nos acompañarán y nos asegurarán que no estamos solos en el camino,
sino que somos parte de la vida y de la gracia de la Iglesia. Todo esto nos
llama a reavivar “nuestra fe” y a vivir con creatividad de espíritu la
tarea de la “nueva evangelización”.
2. Preparando el camino
Como sabéis ya hemos dado a conocer a todo
el Instituto el proceso de preparación del próximo Capítulo General. Después
de escuchar la opinión de los Hermanos Provinciales en el encuentro de Villa
Brea celebrado del 10 al 18 de octubre de 2011 sobre el posible tema del 37
Capítulo General, el Consejo General con la opinión favorable del Centro de
Espiritualidad, sugirió que el núcleo inspirador del 37º
Capítulo General, a expensas de lo que diga el propio Capítulo, gire en torno
al siguiente lema: “Bajó con ellos y vino a Nazaret” (Lc. 2,51).
Cumpliendo los pasos previstos y tras
nombrar la Comisión de Preparación, el 16 de junio de este año 2012, se envió a
todas las Comunidades la Circular de convocatoria, y el 21 de agosto, se
enviaron también tres fichas de reflexión dirigidas a todos los miembros de la
Familia Sa-Fa. En este camino de preparación debemos considerar además la
celebración de los últimos Capítulos Provinciales.
Entre nuestras sugerencias a las
Provincias, además de las indicadas al respecto por las Constituciones, hemos
invitado a vivir dichos Capítulos como una experiencia de fraternidad en todo
aquello que tenga que ver con la vida de los Hermanos, con la de las
Comunidades y con la de las obras, e invitábamos a los Capítulos provinciales, si
lo juzgaban oportuno, a enviar al Consejo General una síntesis de sus
reflexiones. Entre las cuestiones señaladas proponíamos:
1. ¿Comparten la
elección de este posible tema para el próximo Capítulo General? ¿Tienen otra
propuesta que hacer o sugerencias para modificar o enriquecer este tema?
2. Inculturación del
carisma: ¿en qué medida está implicada su Provincia en este tema? ¿Qué
retos se le presentan? ¿Cuáles son las dificultades y las oportunidades?
3. ¿Cuáles son los
problemas principales que debemos abordar y las decisiones que deben
tomarse para asumir correctamente el reto de la inculturación de nuestro
carisma?
4. ¿Tienen algunas
sugerencias que hacer para preparar bien y conducir bien la celebración del
próximo Capítulo General? (sobre las iniciativas, el contenido, los métodos, la
temática a abordar, etc.)
5. ¿Qué sugerencias
concretas hacen los Capítulos Provinciales para que el tema propuesto sea
el núcleo inspirador del próximo Proyecto de vida del Instituto?
6. Otras
sugerencias o propuestas.
En su día sugerimos también a los
diferentes Consejos Provinciales que los Informes a presentar a los Hermanos en los
diferentes Capítulos siguieran el esquema de las Constituciones. Finalmente,
el pasado mes de octubre hemos enviado una nueva Circular dando a
conocer ya los nombres de los Hermanos participantes; la estructura de los
informes a presentar por las Provincias; el número de laicos participantes por
cada Provincia o Viceprovincia y la posibilidad de enviar proposiciones al
Capítulo.
Todos estos primeros pasos de preparación
deben ser una oportunidad para preguntarnos entre otros aspectos, cuáles son nuestros
sueños y preocupaciones; qué convicciones tenemos y en qué ponemos nuestras
esperanzas; qué apoyos necesitamos; cómo
educar y evangelizar en una sociedad como la nuestra y cómo seguir trabajando
Hermanos y seglares juntos.
Aunque todas estas preguntas nos suenen a
repetidos propósitos pocas veces cumplidos no debemos olvidar que la
celebración de un Capítulo debe ser una buena oportunidad para hablar de
nuestras virtudes y debilidades y para seguir interrogándonos. Un Capítulo
es sin duda un espacio de revitalización y su celebración un motivo de reunión,
de ilusión y de alegría.
Como Consejo General ya hemos tratado en
varias reuniones los asuntos relacionados con la organización y preparación del
próximo Capítulo General. En estos momentos estamos elaborando el Informe del
Instituto a presentar al Capítulo, informe que podrá ser completado y discutido
en asamblea con el fin de lograr un acercamiento, lo más ajustado posible, a la
realidad congregacional.
Dice un proverbio chino que la cosecha de
todo un año depende de la primavera en la que se realiza la siembra. Pues bien, de igual manera el éxito del
Capítulo depende de la buena sementera de su preparación y de nuestra capacidad
para abrirnos a la Palabra de Dios y para dejarnos guiar por su Espíritu.
3. Ponerse en camino
“Camino”, en sentido bíblico,
designa la conducta del hombre y de la comunidad de los creyentes. Ponerse
en camino es la actitud de búsqueda en el seguimiento de Jesús para
configurarse con sus sentimientos y con su forma de actuar, dispuestos siempre
a salir de nuestros proyectos personales para abandonarnos al plan misterioso
de la fe en Dios. Un camino que recorrió también el Hermano Gabriel, en
fidelidad al Espíritu, para fundar nuestra Congregación.
Andar este camino precapitular, anclados en la
virtud cristiana de la fe, requiere de cada uno de nosotros una actitud de
encuentro con nuestra interioridad. El camino hacia la interioridad es un
camino profundo, de abajamiento y anonadamiento y, a veces, de sequedad
desértica; un camino de tierra pisada en la cotidianidad de nuestra vida y de
nuestra misión pero, paradójicamente, un camino confiado y repleto de
esperanzas que animan a centrarnos en lo esencial, la fe en Dios.
A este camino de fe debemos añadir el
camino de la esperanza. Nada hay tan disgregador como el escepticismo, la
duda y la desilusión. Frente a la decepción de la Cruz de los discípulos de
Emaús, al igual que los primeros fracasos del Hermano Gabriel, queda la lectura
evangélica de la esperanza capaz de superar la estrechez de lo parcial y de lo
momentáneo. Una esperanza que no es simple espera para ver los resultados, sino
intuición de lo que está madurando en el secreto de la fe con una viva
capacidad para armonizar el análisis de la situación con el discernimiento y la
paciencia activa. Llamados a impulsar y promover una nueva cultura de la
esperanza tenemos que recobrar la confianza en el Señor, en nosotros mismos y
en los otros para disipar nuestros miedos, nuestras omisiones y nuestros
retrasos.
Otra actitud a promover en nuestro camino
precapitular tiene que traducir los signos de la fe y de la esperanza en
frutos de caridad y a ejemplo de Jesús, “pasar haciendo el bien”
(Hch. 10,30) “Pasar haciendo el bien” sería el recordatorio perfecto en
esta preparación del Capítulo General, es decir: “llevar la buena noticia a
los que sufren, vendar los corazones desgarrados, proclamar la amnistía a los
cautivos y a los prisioneros la libertad, proclamar el año de gracia del Señor”
(Is. 61, 1-2) Éste fue el actuar de Jesús de Nazaret y éste debe ser nuestro
programa de vida.
No puede faltar tampoco en este recorrido
precapitular el camino del testimonio. Es justo reconocer que junto a la
generosidad de muchos de nosotros nuestra vida conoce también el acecho de la
mediocridad, del cansancio progresivo y de la mentalidad consumista. También
hay entre nosotros quienes no están convencidos de la utilidad social,
educativa y evangelizadora de nuestra misión; otros quizá encuentran inadecuado
para sus aspiraciones nuestra manera de hacer porque no sabemos reinvertar o
renovar y no faltan quienes se sienten agobiados por las urgencias apremiantes
de cada día. La belleza de nuestra vocación, en consonancia con la esperanza del
misterio pascual, exige testimoniar el gozo del proyecto apostólico del Hermano
Gabriel y vencer con la ayuda del Señor las posibles debilidades humanas.
Tampoco puede faltarnos en este camino
precapitular la actitud del discernimiento. Sea cual sea el significado
que queramos darle, si en nuestras vidas no hay un ritmo regular de oración, hecho
compromiso apostólico, y si no hay un intercambio sincero y flexible en
nuestras relaciones, el espíritu de discernimiento quizá sea una buena
aspiración, pero nunca una realidad conseguida. El discernimiento verdadero nos
hace disciplinados, nos ayuda a ver el mundo a través de los ojos de Dios, a
escuchar las llamadas de la humanidad con los oídos de Dios y a tomar las decisiones
con el corazón de Dios.
Este camino de interioridad, de fe, de
esperanza, de caridad, de testimonio y de discernimiento nos conducirá sin duda
a crear las condiciones idóneas para vivir el espíritu del Capítulo General. En este sentido ya escribía el Hermano
Gabriel en el número 1043 del Nouveau Guide: “El espíritu de Dios es el que debe actuar en
esta asamblea, como también en las reuniones del Consejo, y no el espíritu del
hombre; de lo contrario se hace la obra del demonio”.
4. Cuidados para el camino
Celebrar pues el próximo Capítulo en este
contexto de camino, nos debe comprometer a dar
una respuesta decidida y generosa a los desafíos de nuestra misión en la
escuela o en la parroquia; a trabajar en misión compartida; a adoptar un camino
espiritual que nos permita pasar de la toma de conciencia a la vivencia de los
valores descubiertos; a sostener las Comunidades religiosas y educativas, las
Fraternidades y grupos Sa-Fa y a reproducir con valor la audacia, la
creatividad y la santidad de nuestro Fundador.
Ya no es tiempo de estar afirmando identidades
mirándonos a nosotros mismos. La centralidad de la misión, vista desde el
Reino, pide de nosotros reafirmar y renovar nuestro empeño en la misión para
configurarnos con Cristo y con su Iglesia. La celebración del próximo Capítulo
General debe ser una alarma que nos despierte del sueño de la inercia. Hemos de
vencer la apatía, el cansancio y hasta la posible postración. En definitiva hemos
de recuperar la confianza en Dios.
Ahora bien, salir de este sueño de la inercia
no es tarea fácil. Tendremos que combatir los demonios de nuestra época con las
armas de la fe y la confianza en Dios. Así
pues, no caigamos en la trampa de los que piensan que todo está dicho; de los
que quieren rebajar la utopía; de los que han perdido la esperanza; de los que
les gustaría transformar la realidad a su manera y decir las cosas con las
expresiones que a ellos les gusta o de los que dicen que los Capítulos se
resumen en hacer bellos documentos.
Por lo tanto, Hermanos, manos a la obra. Lejos de nosotros la inoperancia del
cansancio, la parquedad de ilusiones, las observaciones disuasorias y las
fatigas mentales como si ya estuviéramos
agotados antes de empezar la faena. Nos corresponde a nosotros difundir el
acontecimiento, poner entusiasmo y contagiar ilusiones. A pesar de nuestras
muchas limitaciones, estamos obligados a levantar los ánimos, seguros de que
Dios quiere seguir contando con nosotros.
La vivencia de nuestro carisma está en clara
contradicción con el individualismo y los deseos de dominio promovidos como
modelo por la sociedad de consumo y afianzados por los medios de comunicación. La hermandad entre nosotros tiene que ser
sincera y visible para que sea una expresión casi sacramental del significado
de la vida cristiana.
En este empeño, el camino de la comunión se me
ocurre como la única vía.
Nuestra comunión hará que el Señor sea
visible para quienes lo buscan. Comunión con Cristo vivo; comunión con nuestros Hermanos y comunión con
nuestros colaboradores para responder juntos, desde un carisma compartido, a
las necesidades de los niños y jóvenes, especialmente de los más necesitados. Las
diferentes vocaciones están llamadas a enriquecerse desde la propia vivencia
del Carisma y juntos construir el Reino de Dios. Estar convencido de ello
es una buena disposición para comenzar el Capítulo.
Este tiempo de preparación debe ser una
experiencia de familia.
La persona humana es esencialmente relación. Entre nosotros el modo de
relacionarnos tiene que ver con el “espíritu de familia” y la acogida y la
gratitud son las expresiones más bellas. Y hablar de la familia desde
nuestro Proyecto de Instituto nos obliga a hacerlo desde la fe porque la
primera realidad humana redimida y transformada por Jesús fue su propia
familia. La vida de aquella familia de Nazaret debe ser modelo y aliciente
para todas las familias cristianas.
El “año de la fe” nos invita a una
auténtica y renovada conversión al Señor y a vivirla y proyectarla en las
opciones y en los eventos que estamos viviendo en la Congregación. Vivamos este tiempo de preparación
abriéndonos, sin miedo, al Espíritu y despojados de nuestros propios intereses
y caminemos con la esperanza de que el Señor marcha a nuestro lado conscientes
de que el Espíritu tiene también proyectos para nosotros.
5. “Bajar” por el camino de la inculturación
Previsiblemente el
Capítulo tendrá como tema: “el carisma Sa-Fa: una buena noticia en el
corazón de las culturas”, inspirándose en la frase evangélica: “Bajó con
ellos y vino a Nazaret” (Lc. 2,51). Un tema motivado por el actual contexto
de globalización que vivimos y por la difusión del carisma Sa-Fa en las nuevas
culturas.
Lo primero que hay que
decir es que, cuando hablamos de inculturación, estamos pensando en el
Evangelio y en las culturas de los pueblos, es decir, encarnar el Evangelio en
las distintas culturas para enriquecerlas y transformarlas desde los valores
evangélicos.
El fundamento teológico de la inculturación es la Encarnación de Cristo, el
inculturado por excelencia. Se trata pues de una cuestión teológica y sociológica
a la vez.
Una cuestión teológica y sociológica que no
solo afecta a las diferencias culturales entre el Norte y el Sur, Oriente y
Occidente, sino también entre niños y ancianos, adolescentes y jóvenes, entre lo rural y
lo urbano o entre el obrero y el intelectual. Se trata pues de un aprender
“a bajar” como muy bien nos enseña el Venerable Hermano Gabriel en la
introducción a su libro “Gramática francesa”: “Para elevar al niño hasta
uno mismo, hay que descender hasta donde él está.” ¿Cómo vivir la
radicalidad del carisma, encarnándolo en esas distintas culturas, subculturas o
grupos diferenciados?
Inculturar el carisma es pues implantarlo con
humildad y sencillez en las distintas y diferentes culturas y grupos
diferenciados para enriquecerlos y transformarlos. Ello, a su vez,
enriquecerá el carisma en su comprensión y en sus expresiones. Por lo
tanto, todos los aspectos del carisma: el trabajo, la oración, el estilo de vida, la práctica de las
virtudes propias, los consejos evangélicos y las relaciones con las
personas, con el mundo y con los bienes materiales deben ser objeto y tarea de
inculturación.
Es motivo de gozo ver que el carisma congregacional
va haciéndense presente en diversos lugares geográficos. Ahora bien, estar
en varios países y tener miembros de varias culturas no quiere decir que
hayamos logrado la interculturalidad deseable. Empeñarse en recorrer la vía
de la interculturalidad requiere un positivo esfuerzo para ir más allá de la
propia cultura, pensar desde el otro y adoptar un correcto modo de situarse en
relación con él, que no es un rival, sino un hermano.
Inculturar el carisma exige
además adoptar una nueva forma de pensar, de relacionarse, de comportarse, de
trabajar, de celebrar y de convivir. Implica entrar en un proceso de
intercambio y respeto recíproco de culturas diversas, de historias y
sensibilidades, de sentimientos y experiencias de pertenencia, de costumbres y
tradiciones.
En definitiva, es entrar y moverse dentro de una nueva escala de valores. Sólo
así se pueden evitar prejuicios, estereotipos y proyecciones distorsionadas que
incapacitan para el diálogo, la confianza y la buena relación.
Para
recorrer un adecuado itinerario de interculturalidad es preciso abandonar el
pensamiento único y la homogeneización. Es preciso abrirse a la circularidad
de los puntos de vista, ver la interconexión de los valores diferentes, fomentar
el pensamiento positivo e inclusivo y abrirse al mutuo enriquecimiento. Es
así como se va descubriendo una nueva visión del mundo y se va produciendo una
nueva forma de situarse ante los demás. Es una nueva forma de humanización y de
cristianización. Es probable que no falten tensiones, desavenencias y
conflictos. Por eso, se hace más necesario asumir como actitudes el respeto, la
tolerancia, la conversión y la reconciliación.
Debemos pues, crear una
mentalidad corporativa y congregacional que favorezca la disponibilidad para
asumir nuevos destinos y tareas. A la vez,
es imprescindible esforzarse en acoger y acompañar a quienes llegan para que
puedan inculturarse armónica y satisfactoriamente. Ahora bien, quien se adentra
en este camino jamás puede invocar la diversidad para defender posturas
egoístas.
La inculturación dimana precisamente de la
consagración plena y total a Dios y de la entrega a los hermanos, sin distinción de
culturas. Esto es un gran reto para todos nosotros. No hay la menor duda de que
la cultura es determinante para que la consagración a Dios y el servicio a los hermanos sean significativos. El
carisma, revelado como experiencia espiritual del Fundador, debe ser trasmitido, custodiado,
profundizado, desarrollado y actualizado constantemente. De ahí la
inculturación proyectiva del carisma.
6 “Bajar” por el camino de la nueva evangelización
El tema de la nueva
evangelización resalta tanto el aspecto de la novedad como el de la urgencia de
anunciar a Cristo al mundo. Un anuncio enmarcado especialmente en una época de grandes contrastes
en donde la humanidad aparece con sus grandes dones y riquezas y, al mismo
tiempo, con sus dramas e incoherencias y con su prepotencia ciega de crear un
mundo en donde Dios no cuenta.
El Santo Padre, Papa Benedicto XVI, ha
puesto en evidencia en varias ocasiones esta urgencia porque en el contexto
social y cultural actual actúan muchas fuerzas que tienden a alejar la fe de la
vida cristiana queriéndola reducir a una simple dimensión privada y ante ello
es necesario una nueva evangelización. Hablar de nueva evangelización tiene
sentido en la medida que nos permite tomar conciencia de que también hoy la
humanidad necesita de la proclamación del Evangelio y que necesita conocer a
Jesús, el Señor.
Esta situación nos coloca ante la urgencia
de una nueva evangelización que ponga en evidencia la verdad de que sólo Dios
es capaz de responder a todas nuestras expectativas y de llenar de sentido al
hombre. Basta recordar el mandato del Señor a sus discípulos: “Id y haced
discípulos míos entre todos los pueblos que yo estaré con vosotros hasta el fin
del mundo”. Misión siempre actual porque el Señor tiene siempre algo
nuevo que manifestarnos.
Ahora bien, esta nueva evangelización
reclama una cierta originalidad y demanda conocer bien la diversidad de los
campos de misión. Se trata no sólo de anunciar el Evangelio o de transmitir
la fe a otras personas, sino de algo más delicado y desafiante que consiste en
hacer que se perciba que los valores del Evangelio y, sobre todo, la persona de
Jesús tienen mucho que decir al ser humano.
Y se trata también de interrogarnos
personal e institucionalmente si cada uno de nosotros estamos en condiciones de
entrar en un proceso de nueva evangelización cuando constatamos la dificultad
que encontramos para comprender el mundo y sus nuevos escenarios. Fijémonos pues,
en las situaciones, estilos de vida, maneras de pensar y de actuar,
prioridades, valores y antivalores que están en el centro de nuestras vidas y
que exigen una profunda evangelización y una conversión radical que nos
convierta en personas creíbles de lo que anunciamos.
Las exigencias de la
nueva evangelización nos deben llevar a un serio examen de conciencia personal
e institucional que nos permita ver nuestro compromiso con los valores del
Evangelio.
Ello reclama de nosotros un nuevo estilo de evangelizar, menos lleno de
nosotros mismos y de nuestros proyectos, y más lleno de Dios. En definitiva, ser
los primeros en dejarnos evangelizar.
Por ello estamos llamados a vivir en un
proceso de conversión que ayuda a comprender que la tarea de la evangelización
no se reduce a un quehacer, sino que se manifiesta como una exigencia que
tiene que ver más con el modo de vivir, con el modo de ser y menos con el hacer
o la actividad que puede implicar el trabajo de proclamar el Evangelio.
El estilo de
evangelización reclama una nueva formulación y nos obliga a cambiar también a
nosotros.
Las certezas, los modos de llevar adelante la misión, las actitudes para ir al
encuentro de aquellos que no conocen el Evangelio, de quienes lo han olvidado o
no les interesa o el conocimiento y el diálogo con las culturas son solamente
algunas de las realidades que nos obligan a pensar que la evangelización tiene
que pasar por canales nuevos, los cuales muchas veces nos son desconocidos.
Hoy la nueva
evangelización nos invita a desarrollar nuestra capacidad de diálogo, de
escucha, de cercanía a la gente, promoviendo a los destinatarios del Evangelio
para que pacientemente puedan llegar a convertirse en agentes de su propia
evangelización. Como en todos los tiempos la humanidad sigue más lo que se transmite
con la vida y menos aquello que se comunica con las palabras.
Y nos haremos creíbles de lo que anunciamos
si nuestro anuncio va acompañado de obras que promuevan la justicia y la paz,
si nuestras presencias misericordiosas se ubican en medio de los más
necesitados. Los retos de esta nueva evangelización nos pueden encontrar
desprevenidos e incapaces de dar respuestas adecuadas a las exigencias de
nuestros contemporáneos. Una realidad que debe reclamar la atención de nuestro
próximo Capítulo General.
Quienes compartimos el
carisma Sa-Fa tenemos una página de Evangelio original que vivir y compartir. Esto pide precisar cuál
es la contribución específica de nuestro carisma y cómo situarnos en una lógica
de reciprocidad acogiendo los valores evangélicos presentes en las otras
religiones y tradiciones. En esta perspectiva la persona que yo evangelizo
también me evangeliza, incluso la persona que no es creyente y que no conoce el
Evangelio también misteriosamente y, quizás sin saberlo, me evangeliza. Si
el deseo para dejarse evangelizar está vivo, se abre un horizonte de
reciprocidad en las relaciones humanas donde se hace patente la centralidad de
la gracia en todo el proceso de la evangelización. Una nueva perspectiva del
proceso de evangelización nos invita hoy a acercarnos a los otros con esperanza
y a descubrir con ellos y en sus circunstancias las semillas de Dios.
Finalmente
Animo a todos
los miembros de la Familia Sa-Fa a rezar por el éxito de la celebración del
próximo Capítulo General que comenzará el 18 de julio 2013 e invito a todos a
incorporar en sus ejercicios de piedad privados o comunitarios la Oración que
dimos ya a conocer por esta intención. Oración que se mantendrá hasta
el final de las sesiones del Capítulo.
Un saludo fraterno a
todos los Hermanos y miembros de la Familia Sa-Fa que verdaderamente quieren
ponerse en camino para que la celebración del próximo Capítulo General sea una
gracia para nuestro Instituto y la sociedad. Y un saludo muy afectuoso para todos los
hermanos y hermanas enfermos o enfrentados a momentos difíciles y una
invitación a todos a mirar el ideal de vida que nace del carisma taborianiano
sin dejarnos frenar por las contradicciones y dificultades que podamos
experimentar a nuestro su alrededor.
Que el Señor nos sostenga a todos y nos
conceda las mejores perspectivas de trabajo, amor y de paz.
Roma 8-12-2012
Fr. Juan Andrés Martos Moro SG
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12 de Julio de 2012 - HNO. VICTORINO IZQUIERDO
En la madrugada del 11 de julio, fallecía a los 96 años en Montevideo, el Hno. Victorino Izquierdo.
Paulino Izquierdo Monzón, había nacido el 31 de diciembre de 1915, en Santibáñez de Esgueva, un pueblito de la provincia de Burgos, España; siendo el sexto hijo de: Escolástica Monzón y Máximo Izquierdo. El clima familiar y cristiano de su entorno creó desde muy pequeño en él un gran sentido de unidad y de amor a Dios, la familia, a la Iglesia, a la oración y a los necesitados.
Su infancia y primeros estudios se desarrollaron en este mismo lugar siendo un niño muy inquieto y alegre, su vocación tuvo como origen la visita del Hno. Benjamín Monin a su pueblo a principios de noviembre de 1927, en busca de candidatos vocacionales para al Sagrada Familia., así fue que con el consentimiento de sus padres, en diciembre de 1927, a los 12 años ingresó al Aspirantado de La Horra.
Luego de tres años en el aspirantado, en junio de 1930 salía desde España junto a ocho compañeros para hacer el postulantado y noviciado en Villa Brea (Turín, Italia), Inició su Noviciado el 8 de septiembre de 1931, día de la Natividad de la Virgen y emitió sus primeros votos un año después, el 8 de septiembre de 1932. hecha su Profesión Religiosa, el Superior General le comunicó que su destino sería Uruguay.
Antes de partir a su destino en América, pasó una semana con su familia y llegó el día de la despedida, dolorosa para toda la familia pero sobre todo para su madre, con la cual lo unía un profundo afecto y respeto. Por tanto, el 17 de octubre se embarcó junto a los Hnos. Crescencio, Albino y Fulgencio en el buque francés Florida con destino a Montevideo. Luego de pasar por el colegio de la Sagrada Familia fueron a su destino final, la Comunidad de Progreso. Allí el Hno. Ignacio Arenales que sería su Director de Escolásticos, los recibió junto a sus 23 compañeros. Tres años pasó en el Escolasticado durante los cuales obtuvo los siguientes títulos: Maestro oriental, maestro Infantil Argentino y aunque rindió todos los exámenes para profesor de idioma español, literatura e historia, no recibió el título ya que no pudo realizar las prácticas.
Inició su tarea docente en marzo de 1935 en el Colegio Sagrada Familia de Aguada, luego de 22 años fue destinado en marzo de 1957 al colegio San Juan Bautista como Vice Superior de la Comunidad, fueron 12 años en los que fue Profesor, Subdirector, Secretario de Liceo y Director.
Como docente supo unir la cordialidad a la firmeza en la relación con sus alumnos granjeándose el aprecio de generaciones enteras de exalumnos que guardan con veneración el recuerdo de su maestro.
El Hno, Alfredo Alfonso Rodríguez del Olmo, Hno Provincial por el año 1968, lo nombró Superior de la Comunidad de Aguada y Director del Colegio Sagrada Familia, tarea que desempeñó por 23 años A partir de ese momento, permaneció en esta Comunidad hasta el día de su muerte, teniendo una permanente presencia y relación con padres y exalumnos y fundamentalmente poniendo en práctica su proverbial don de gentes, una fina sensibilidad y un exquisita delicadeza en el trato con las personas.
Iba a cumplir 80 años de profesión el próximo 8 de setiembre. Su Pascua es la plenitud de la consagración que un dìa hizo al Padre como Hermano de la Sagrada Familia y a la que fue fiel por gracia de Dios, hasta este día. Como Hermano quiso a la Congregación, la sirvió con fidelidad y fue siempre un hombre “de comunidad”, atento a sus hermanos, fiel al ritmo diario de oración, trabajo y vida de familia. Guardaba un entrañable recuerdo del Hno. Amado que en su lecho de muerte, en 1936, le había augurado su éxito como Hermano ante sus alumnos, y del inefable HD, el maestro de tantas generaciones de uruguayos a través de sus celebrados textos de historia.
A fines de mayo, el Hno. Victorino, del presente año comenzó con una serie de complicaciones en su salud y desde el 8 de junio estuvo internado en la clínica por haber sufrido una caída y fractura del fémur, situación que fue empeorando hasta su desenlace en la madrugada de hoy. Sus restos son velados en la capilla del Colegio “Sagrada Familia” de la Aguada, y en la mañana del jueves 12 serán trasladados a la Basílica Ntra. Sra. Del Carmen (Aguada) para al celebración Eucarística y su posterior sepelio en el Cementerio del Norte, de Montevideo
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Abril 2012 - COMUNICACION Nro. 15 DEL CONSEJO PROVINCIAL
El Consejo Provincial se reunió los días 22 y 23 de abril en Buenos Aires. El primer día se abordaron asuntos referentes al Capítulo Provincial y la vida de las Cdades.. Además estuvo dedicado a la Cdad local, con quien se compartió la Lectio y la reunión comunitaria por la tarde. El 2º día se dedicó a temas administrativos y económicos con la presencia del Administrador Provincial, Hno. José Mario Dipacce y el Administrador Adjunto para el Uruguay, Sr. Juan Carlos Olivera.
HERMANOS DELEGADOS. Como se había anunciado, el Consejo procedió al escrutinio de la elección de Hermanos delegados al Capítulo Provincial contando con todos los votos de las Cdades y los Hermanos que están en el exterior. Como resultado fueron elegidos los siguientes Hermanos: Hno. José Mamerto Sánchez, Javier González, Hno. Fernando Leon, Hno. Miguel C. del Corro, Ernesto Cordero, Rogelio Dewaele, Valentin Vilca, Victorino Lázaro y José Lahoz. Suplentes: Hnos. Alejandro Salvatierra, Héctor Da Rosa y Juan Andrés Acosta
DECISIONES TRANSITORIAS. Son las que el Consejo Provincial tuvo que tomar de cara al próximo Capítulo Provincial para resolver, transitoriamente, algunos asuntos que serán pautados de ahora en más por el propio Capítulo. En efecto hay diferencias entre las tradiciones y legislaciones anteriores de las respectivas Provincias en cuanto al número de delegados de derecho y elegibles, incluso en un caso se preveía la nueva modalidad prevista por el último Capítulo General de Asamblea (C.216 bis) en vez de Capítulo pero sin contar con experiencia aún, ni con reglamentación al respecto. La posibilidad de asistencia de todos los Hermanos, asumida por el Consejo, corresponde esta última modalidad.
PROYECTOS DE VIDA. Se estudiaron y aprobaron los Proyectos de Vida Comunitaria de las Cdades del Escuti, Sda. Familia de Salto y Vicente Barreix. Las observaciones o sugerencias serán dadas a conocer a los Superiores locales.
REUNION DE HERMANOS. Se ratificó la reunión de Hermanos en Salto para el 11 y 12 de mayo como una instancia anual de confraternización y formación. En este caso el nuevo proyecto educativo del Instituto, la preparación del Capítulo Provincial y la puesta en marcha del proyecto de Cara al Viento serán algunos de los principales temas a compartir.
CONSEJO DIRECTIVO PROVINCIAL. Después de una consulta a los Directivos e integrantes de Equipos de Animación de Uruguay el Consejo procedió a invitar a las personas designadas. Habiendo aceptado esta invitación, el Consejo quedó integrado por los el Prof. Daniel Tort, Prof. Mercedes Patrón, Prof. Majo Moreira y contable Juan Carlos Olivera y los Hnos. José Ma. de la Fuente y José Mamerto Sánchez.lo integrarán El nuevo Consejo Directivo Provincial cuya la misión será la animación y gestión sobre las Cdades. Educativas de Uruguay tendrá su primera sesión el 15 de mayo en la Cdad. Vicente Barreix.
PRESUPUESTOS. Después de una detallada presentación de los respectivos presupuestos y contando con los debidos estudios y consideraciones a cada uno de ellos, el Consejo aprobó los presupuestos de los Colegios Sagrada Familia (Aguada), San Juan Bautista, Sagrada Familia de San José, Sagrada Familia de Salto, Residencia Universitaria y Campanero. También se aprobaron los presupuestos de las comunidades de Aguada, Vicente Barreix, San José, Salto y Administración Provincial de Uruguay. Las consideraciones expuestas por la administración y ratificadas por el Consejo serán comunicadas posteriormente.
ACTAS DE LOS CONSEJOS DE DIRECCIÓN. Respondiendo a la solicitud realizad ya se han recibido varias actas de los Colegios de Aguada y San Juan Bautista correspondientes al mes de abril.
“HUELLAS EN EL CAMINO”. El Consejo aprobó la impresión de 500 ejemplares del libro “Huellas en el Camino” de 345 págs que recoge los documentos referidos a la Causa de Beatificación del Hno. Gabriel: 1) Summarium de su vida, virtudes y fama de santidad; 2) Oficio histórico sobre proceso de canonización del siervo de Dios; 3) Informatio “sobre la heroicidad de las virtudes” 4) Relación y votos de los consultores 5) Decreto final de aprobación de la “Informatio”. La recopilación de documentos ha sido avalada por el Hno. Teodoro Berzal y estuvo a cargo del Hno. José María de la Fuente, a quien agradecemos la esmerada preparación de esta publicación.
HERMANOS ASESORES DE LAS FRATERNIDADES. A sugerencia de algunos Hermanos y estando ya determinados los Hnos. Asesores de Fraternidades para este año, se anexa una lista de los Hnos. Asesores o referentes de cada Fraternidad si bien en varios casos la comunidad o algunos Hermanos de la misma participan regularmente del acompañamiento de la Fraternidad.
HERMANOS EN EL EXTERIOR. Los Hermanos Miguel Vargas y Carlos Raco continúan con sus respectivas experiencias formativas. En las comunicaciones mantenidas dan cuenta del buen ánimo de ambos a pesar de lo intenso de estas instancias. Mandan saludos a todos y esperan que los acompañemos con la oración solidaria y fraterna. El Hno. Carlos ha comenzado con el Retiro de mes incluido en el programa del Instituto Centroamericano de Espiritualidad. El Hno. Miguel tendrá una experiencia similar pero más adelante y en dos bloques de 15 días.
MISIÓN NAZARENA DE SEMANA SANTA. Tuvo lugar entre el sábado 31 de marzo y el 7 de abril en José Pedro Varela (Depto. de Lavalleja) y poblaciones cercanas, a unos 250 kms. de Montevideo con la participación de unos 80 jóvenes y la presencia permanente o parcial de varios matrimonios. Como todos los años fue una ocasión de contacto con la gente del lugar, niños, jóvenes, familias y la oportunidad para que nuestros jóvenes animen y vivan las celebraciones propias de la Semana Santa.
INAUGURACIÓN EN SANTA LUCÍA. El lunes 16 de abril se concretó la inauguración de la Obra Popular Educativa y Colegio María de la Esperanza en Sta. Lucía, población de unos 8.000 habitantes a 70 km. de San Miguel de Tucumán.
o El día anterior los Socios de la ASF tuvieron una asamblea en el complejo residencial de la Universidad de Tucumán, donde se alojaron, para estudiar formas alternativas de financiación para esta nueva obra y otras promovidas y sostenidas por la Asociación.
o El acto inaugural, prolijamente preparado por la Comunidad Animadora y la Comunidad local contó con delegados de diversas obras educativas de Uruguay y Argentina, la presencia del Obispo diocesano y autoridades locales y universitarias.
o La parte formal se llevó a cabo en un ambiente de buen gusto, sencillez y alegría, bajo una gran carpa que defendía a los presentes del implacable sol de mediodía como de posibles lluvias, muy frecuentes en el lugar.
o Luego se visitaron las nuevas instalaciones que se están construyendo bajo la supervisión de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Tucumán, con una técnica que en vez del ladrillo utiliza cañas de bambú debidamente revestidas luego con revoques y otras terminaciones.
o A mediodía se compartieron típicas empanadas y especialidades del lugar esmeradamente preparadas por la comunidad anfitriona y en la tarde fue la ocasión para las presentaciones de cantos y bailes folclóricos a las que se sumaron improvisados artistas de las delegaciones visitantes.
CONFAR. Entre el 10 y 13 de abril tuvo lugar la Asamblea Anual de la Confar que se celebra en “El Cenáculo”, Pilar, a unos 60 km. de Buenos Aires.
o Participaron algo más de 100 Congregaciones contando además con delegados de las diferentes regionales. La parte central estuvo animado por el benedictino de origen belga Simón Pedro Arnold que vive en el Monasterio de la Resurrección, fundado por él en el Perú a orillas del lago Titicaca.
o Motivo central de sus exposiciones fueron las grandes interpelaciones espirituales del mundo de hoy a la Vida religiosa y pistas de respuesta basadas en la experiencia del discipulado.
o Como era Asamblea electiva, al final se procedió a constituir la nueva junta Directiva que quedó así conformada: Presidente, Hna. Marisa Biasutti HSAP, Hermanas de San Antonio de Padua (Antonianas). Vicepresidente 1º Hno. Benito Zampedri HICP, Menesianos. Vicepresidente 2º Hna. Silvia Ana Tulissi HFG, Franciscanas de Gante. Vocales: P. Vicente Tirabasso SDB (Salesianos), Hna. Ruth Otero RJM (Religiosas de Jesús María), P. Agustín Rivarola SJ, Jesuita, Hna. Cristina Pella FMA, (Hijas de María Auxiliadora), P. Ramón Correa CSsR, Redentoristas, y Hna. Ana María Guantay AM, Agustinas Misioneras.
ENCUENTRO DE HERMANOS. Los Hermanos menesianos promueven un encuentro de Hermanos de congregaciones laicales y clericales en Bialet Massé entre el 19 y 20 de Octubre próximos. Oportunamente harán llegar más información.
Discernimiento Vocacional. Dando comienzo a una nueva edición de los encuentros de discernimiento vocacional – Belleydoux, Belmont, Belley -, se realizó el encuentro “Belleydoux” en San Antonio los días 28,29 y 30 de abril animado por Hermanos y formandos de la Casa de Formación y el Hno. José María de la Fuente. Los participantes en esta ocasión fueron: uno de Sta. María, dos de Montevideo y uno de Minas.
Calendario de Mayo
3-5 de Mayo. Pascua Joven. San Antonio
11-12 de Mayo. Encuentro de Hermanos en Salto
13-14 de Mayo. Consejo Provincial en Salto
15 de Mayo. Consejo Directivo Provincial. Montevideo
17-20 de Mayo. Fin de Semana como en Nazaret II. Campanero
19-21 de Mayo. Asamblea CONFRU. Montevideo
26 de Mayo. Retiro de Educadores. Piedras Blancas
HERMANOS ASESORES DE LAS FRATERNIDADES NAZARENAS 2012
(Plan de Vida FF NN, art. 26)
Hno. Delegado para las Fraternidades: Hno. Ernesto Cordero
Hermanos Asesores locales:
1. AGUADA: Hno. José Ma. de la Fuente
2. SAN JOSÉ DE MAYO 1: Cdad. Hermanos.
3. SAN JOSÉ DE MAYO 2: Hno. Ernesto Cordero
4. SALTO: Hno. Germán Camarero
5. TANDIL: Hno. Mario Fierro
6. POCITOS: Cdad. de Hermanos
7. ESCUTI: Hno. Juan Carlos León
8. URQUIZA (Cdba.): Hno. José Mamerto
9. VILLA URQUIZA (Bs.As.): Hno. José Lahoz
10. TABORIN: Hno. Fernando Mallo
11. BELL VILLE: Hno. Victorino Lázaro
12. CANELONES: Hno. Ricardo López
13. STA. MARÍA- Las Mojarras: Hno. Tarcisio
14. STA. MARÍA- Chañar Punco: Hno. Alejandro Ferrer
15. STA. MARÍA- Fuerte Quemado: Hno. Fernando León
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Abril 2012 - SALUDO PASCUAL DEL SUPERIOR GENERAL
Pascua 2012
Jesús le dice: mujer, ¿por qué lloras?, ¿a quién buscas?” Jn 20, 11-18
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, Aspirantes a Hermanos, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas, Catequistas y amigos de la familia Safa:
Con este versículo del evangelio de San Juan inicio mi saludo de esta nueva Pascua que nos llega un año más con la celebración litúrgica de la muerte y de la resurrección de Jesucristo. Como tema de mi mensaje os propongo en esta ocasión la imagen de María Magdalena seguidora de Jesús desde Galilea por ser ella la primera que llevó a los discípulos la noticia de la tumba vacía y de la resurrección del Señor.
Recogida en su dolor, María Magdalena creyó que “se habían llevado a su Señor” (Jn. 20, 13) a quien confunde con el jardinero y le pregunta por el cuerpo ausente de Jesús pues su anhelo por el cuerpo muerto le impide ver la imagen del Resucitado. Pero cuando en ese encuentro personal y gratuito el Maestro la llama por su nombre se le hace patente la revelación del misterio y ve con claridad la victoria de la vida sobre la muerte.
El relato de esta experiencia que generó un nuevo sentido de vida en María Magdalena me sugiere poner de relieve en este saludo pascual la importancia que debe tener en nuestra vida y en nuestra actividad pastoral la experiencia fundante del encuentro con el Señor. Un encuentro que nos permite gustar interiormente la alegría viva de su presencia para testimoniarla después en nuestro entorno. Posibilitar este encuentro debe ser la primera tarea de nuestra actividad pastoral para que llegue a ser efectivamente evangelizadora.
La pregunta de Jesús a María Magdalena: ¿Por qué lloras? ¿A quién buscas? Son preguntas que trascienden el personaje, nos interrogan a cada uno de nosotros y nos invitan a tomar conciencia de nuestras pérdidas y de los sentimientos que las acompañan. Como ella también nosotros debemos preguntarnos por las causas de nuestras tristezas y si de verdad no estarán motivadas por la ausencia de Jesús.
¿A quién buscas? Fue la pregunta que también había formulado Jesús a los discípulos de la primera hora al comienzo del evangelio de San Juan dando a entender que todo encuentro con Jesús necesita como punto de partida un deseo por conocerle. En efecto, quien no desea no logra, quien no busca no encuentra y quien se detiene nunca llega. De igual manera también nosotros podemos preguntarnos sobre cuáles son nuestras búsquedas y sobre los deseos que nos mueven a ello.
Así pues para poder anunciar a Jesús en primera persona es necesario tener la experiencia de encontrarnos con Él. Por eso María Magdalena al oír su nombre descubre una nueva dimensión y cuando feliz le responde “Maestro”, su tristeza por el Cristo muerto se transforma en alegría interminable.
Ahora bien la búsqueda de Jesús exige la pasión y la ternura de esta mujer porque a veces también el Maestro aparece vestido de hortelano y necesitamos de una mirada especial para reconocerle en los contextos de nuestra vida y en nuestros hermanos los hombres.
Se me ocurre que del relato de la Magdalena podemos también nosotros subrayar algunos rasgos para favorecer una “pastoral del encuentro”. Entre ellos:
a) el deseo de volver a Él ya que toda acción pastoral y apostólica se sustenta en una fuerte y cuidada experiencia de “estar con Él”, experiencia que motiva el encuentro con el mundo.
b) como discípulos, para reconocer la voz del Maestro e identificarnos con sus gestos. Una actitud que debe acompañarnos para no correr el riesgo de quedarnos en una generosidad humana sostenida más por nuestros sentimientos que por los que por los de Jesús.
c) en el huerto de nuestro mundo, para dejarnos afectar por la presencia con tantos hombres y mujeres, creyentes o no, que comparten nuestras mismas preguntas y se enfrentan en el trabajo, en la escuela o en la familia a los mismos problemas.
Sentirnos “apóstoles del encuentro” con Jesús en nuestra actividad pastoral a ejemplo de la Magdalena es probablemente uno de los servicios más importantes a realizar hoy en nuestra sociedad tan generadora de soledad. Debemos estar seguros de que detrás de cada búsqueda hay un Jesús que pronuncia nuestro nombre.
Por eso Cristo resucitado se conmueve ante el amor desinteresado y fiel de la Magdalena y no puede seguir ocultándose. Como ella respondamos a la llamada de Jesús resucitado que sale a nuestro encuentro para hacer más llevaderos nuestros temores, nuestras dificultades y nuestras preocupaciones. El recuerdo de la Magdalena es la memoria de un amor posible cuando todo parece perdido.
Estimados hermanos y amigos, el Resucitado solo puede ser visto por las personas a quienes Él se revela y solo se revela a aquellos a quienes les confía una misión. Pidámosle esta gracia y como María Magdalena démonos prisa para dar la noticia de que el Señor vive, tarea de la que está urgido nuestro tiempo.
Que cada uno de nosotros podamos decir como María Magdalena: “he visto al Señor y me ha dicho esto”, Jn 20,18.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
H. Juan Andrés Martos Moro
Superior General HSF
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Marzo 2012 - COMUNICACIÓN Nº 14
Los días 19 y 20 de Marzo, coincidiendo con la Festividad de San José y un nuevo aniversario de la llegada de los Hermanos al Río de la Plata, el Consejo Provincial tuvo su reunión ordinaria en Santa María de Catamarca. En la reflexión comunitaria de la Lectio, se recordaba el pensamiento de Juan Pablo II cuando presenta a San José como depositario del Misterio de Dios en su Exhortación Apostólica Redemptoris custos:
o “Se puede decir que lo que hizo José le unió en modo particularísimo a la fe de María. Aceptó como verdad proveniente de Dios lo que ella ya había aceptado en la anunciación. El Concilio dice al respecto: «Cuando Dios revela hay que prestarle "la obediencia de la fe", por la que el hombre se confía libre y totalmente a Dios, prestando a Dios revelador el homenaje del entendimiento y de la voluntad y asintiendo voluntariamente a la revelación hecha por él». La frase anteriormente citada, que concierne a la esencia misma de la fe, se refiere plenamente a José de Nazaret. El por tanto, se convirtió en el deposityario singular del misterio “escondido desde siglos en Dios” lo mismo que se convirtió María en aquel momento decisivo que el Apóstol llama”la plenitud de los tiempos”(RC 4b 5a)
Tanto en el viaje de ida como de vuelta el Consejo entró en Sta. Lucía, ya que la carretera a Sta. María pasa enfrente. En la primera ocasión, siendo domingo, simplemente pudo observar la marcha de la construcción de las instalaciones de la obra y en el regreso pudo saludar a miembros de la Cdad. Animadora y los nuevos alumnos.
Animador del Retiro Anual. Confirmada la fecha de nuestro retiro anual en Florida y que será del 2 al 8 de enero, faltaba determinar el animador del mismo. Será el P. Miguel Pastorino del clero de la Arquidiócesis de Montevideo que el año pasado animara el encuentro anual de Catequistas en San José y que en la actualidd es responsable Arquidiocesano de las Comunicaciones Sociales.
Consejo Directivo Provincial. Avanzando en este proyecto, se procedió a estudiar el resultado del sondeo realizado a los Directivos e integrantes de Equipos de Animación reunidos en Piedras Blancas en diciembre del año pasado. Se conformó una lista de laicos (4) y Hermanos (2) que será dada a conocer una vez logrado el consentimiento de los interesados.
Capítulo Provincial. El Consejo Provincial ratificó la fecha para su realización. Teniendo en cuenta lo propuesto por cada uno de los Directorios provinciales anteriores, que contenían algunas diferencias, y respetando aquello de que el número de delegados debe ser superior a los de derecho, definió en 9 el número de Hermanos delegados. Próximamente se enviará a las Cdades. la carta y papeletas para la elección.
Casa de Formación
o El Consejo escuchó el informe del Superior de la Comunidad sobre el proceso de organización de la Comunidad que se viene cumpliendo satisfactoriamente. Los Hermanos Escolásticos comenzaron los cursos en el Cefyt, que estrena nuevo plan de estudios. No hacen todas las materias visto que algunos ya tenían aprobadas algunas de ellas. Esto es positivo para los objetivos de este primer año de escolasticado.
o Los demás formandos participan regularmente de las clases del Instituto Emaús que reúne unos 50 formandos de diversas congregaciones y tiene como sede el así llamado “palacio de cristal” del Escuti.
o Como misión, la comunidad de formación acompañará el proceso de confirmación de los chicos y chicas del Escuti. Además los sábados de tarde se hacen cargo de la catequesis de Villa Urquiza y los domingos participarán de la celebración eucarística del barrio. A esto debe sumarse la presencia oportuna en instancias provinciales sean encuentros, misiones, retiros, etc de la pastoral juvenil.
Nombramiento. El Consejo Provincial ha designado al Hno. José Mamerto Sánchez como responsable de los Escolásticos, a tenor del art . 211 b de las Constituciones. Asimismo lo ha nombrado como Hermano acompañante de la Fraternidad Nazarena del barrio Villa Urquiza, (Escuti).
Proyecto de Vida Comunitaria. El Consejo consideró y aprobó globalmente el Proyecto de vida de la Comunidad de Buenos Aires. Entre los puntos específicos de esta Comunidad está el de la nueva casa. La Comunidad elaborará un plan de transformaciones y posible fecha de traslado para ser elevado a la aprobación del Hno. Provincial y su Consejo. La próxima visita del Consejo será propicia para dialogar sobre el tema teniendo en cuenta que se trata de un bien de Provincia y por consiguiente conviene no perder de vista la dimensión de futuro.
Pastoral Vocacional Provincial. Continuando lo trabajado en los últimos encuentros de Hermanos, el Consejo se abocó a la consideración del proyecto particular “De cara al viento” que está dirigido a un grupo limitado de jóvenes “20 up” que ya han cumplido un proceso inicial en nuestra pastoral juvenil. La animación de este proyecto, que preveía una primera instancia presencial por “zonas” el 14 y 15 de abril, tiene como referentes principales los Hnos. del Equipo Vocacional integrado en este momento por los Hnos. Javier, Rogelio y Fernando León quien fue invitado a participar de la reunión de Consejo para analizar la marcha del proyecto.
o Se constató que si bien la carta de invitación está pronta no se ha definido aún la nómina de participantes por consiguiente no se puede comenzar en la fecha prevista. También se vio la conveniencia de una reunión del Equipo y dadas las distancias se propuso que se aprovechara antes o después del encuentro de Hermanos en Salto, en mayo próximo.
o La tarea inmediata sería conformar la lista de participantes (no más de 25 por país). Para eso los referentes serán el mismo Hno. Fernando León, el Hno. Miguel Calixto y Nadia Ruiz por la pastoral juvenil SAFA de la ASF y los Hnos. Javier, Rogelio y José María junto a Marcelo Mónico y Majo Moreira – del Equipo de Past Juvenil y Vocacional – por el sector de Uruguay.
o Un 2º punto que retuvo la atención del Consejo relacionado con el proyecto de pastoral vocacional provincial, fue la propuesta de “Semana Vocacional Familia SAFA”. En principio la propuesta ha tenido buena aceptación y enfrentamos ahora la tarea práctica de ponerla en marcha para este año y en las condiciones posibles. El Hno. Provincial ha dirigido una nota al Comité Apostólico de la ASF explicando el motivo de esta iniciativa Comité Apostólico. Lo mismo ha hecho al Equipo de Catequesis del sector de Uruguay, donde si bien existe el Equipo de Pastoral Juvenil y Vocacional, se considera que la catequesis es más abarcativo de todos los planos de la Comunidad Educativa, tienen por sí mismas estructuras más amplias y más agentes pastorales. Por otro lado el Equipo de Past Juvenil y Vocacional está más ligado al proyecto específico para jóvenes de “Cara al Viento”. La nota ha sido enviada también a este Equipo y al de Causa de Beatificación que son con Catequesis los que más atienden la animación Pastoral directamente.
o Nos parece que estos proyectos en sí mismo atractivos, merecen que los apoyemos con la oración personal y comunitaria para que realmente sean instrumentos donde el Espíritu se exprese y llegue con la novedad carismática que supone, a todos sus destinatarios.
FORMACIÓN PERMANENTE
o El Hno. Miguel Vargas ya está en Chile participando del Curso Internacional de Formadores promovido por la Conferre y que, en este año, reúne formadores de nueve países diferentes. El alojamiento lo hace en casa de los Hermanos de Lasalle lo que le ofrece un apreciado entorno comunitario muy próximo a nuestro estilo de vida. La extensión del curso es hasta el 14 de diciembre.
o En setiembre próximo tendrá lugar en Roma un curso de formación permanente intercongregacional sobre la “Identidad y Misión del Religioso Hermano en la Iglesia y el mundo de hoy”. Se trata de un proyecto promovido por 8 congregaciones de Hermanos al que los une el carisma de la misión educativa. Participarán 4 ó 5 Hnos. por cada Instituto, entre ellos el Hno. Fernando León de nuestra Provincia. Los objetivos principales de este programa son:
Profundizar en el tema de la común identidad y misión como Hermanos en la Iglesia y el mundo actual; fomentar el conocimiento y la relación entre nuestros Institutos de Hermanos; vivir una experiencia intercongregacional de formación que nos ayude a reflexionar, orar y vivir juntos este momento importante de nuestra historia; compartir una experiencia de formación conjunta que pueda dar cauce a otras acciones formativas en el futuro; animar a los Hermanos de los diversos Institutos a encontrarse para realizar también esta reflexión a nivel local en sus Provincias o Distritos; Elaborar materiales que puedan ayudar a continuar la oración y la reflexión sobre el tema.
Fraternidades Nazarenas. El Consejo consideró y aprobó una solicitud del Equipo Coordinador de las Fraternidades para que, teniendo en cuenta el pedido y el interés de algunos miembros de fraternidades que ya realizaron su “Compromiso por siempre” puedan realizar la renovación de los compromisos definitivos cada vez que haya una ceremonia de celebración de compromisos ya sea en los retiros o convivencias. Esta propuesta responde además a que los miembros de fraternidades se guían por las modalidades y reglas de los Hermanos en base a lo cual se hizo la proposición aprobada por el Consejo.
Equipo de la Causa en la ASF. Se dialogó en torno a la propuesta, ya hablada, de conformar un Equipo con dos representantes por obra de la ASF, para la animación de la Causa de Beatificación del Hno. Gabriel. En la reflexión surgió si ese equipo no debería atender la animación, un poco más amplia, de “identidad y carisma”, involucrando aspectos relativos a la identidad de la Provincia, la relación con la Fraternidades, etc.. Dada la proximidad del Capítulo Provincial se estimó más conveniente esperar lo que este resuelva sobre el tema y obrar luego en consecuencia.
Nómina de Directivos y Responsables. El Consejo acordó que una vez comenzados los cursos en las diversas Comunidades Educativas y regularizadas ya las designaciones o nuevas incorporaciones de Directivos se publiciten las respectivas nóminas que acompañarán esta comunicación. Se adjunta también la integración de los Comités, Equipos de Animación y Comisiones de Hermanos como para tenerlos presente todo el año.
Comunidades Educativas. El Consejo abordó diversas situaciones planteadas en algunas Comunidades Educativas dando las respuestas oportunas para cada situación. Asimismo accedió a la solicitud planteada por la ASF para que el Hno. José Mamerto asumiera la representación legal del Escuti. Respecto a la transformación que se viene operando en la Escuela de Progreso y ante la dificultad de poder firmar convenio con el Estado con la actual personería jurídica recibió la comunicación que las mismas Hermanas, autorizadas por la superiora Delegada, gestionarán una nueva personería jurídica.
Actas de los Consejos de Dirección. Para un mejor acompañamiento de la vida de las Cdades. Educativas y teniendo como referencia lo que hace el Consejo General con las Provincias, el Consejo resolvió solicitar a los Directores Generales Generales y sus Consejos que se envíen copia de las Actas del Consejo de Dirección al Consejo Provincial. Como en general todas se hacen hoy en soporte informático, se solicitará que las de Uruguay sean enviadas a una dirección electrónica que se indicará en la comunicación oficial a los Consejos Directivos, mientras las de la ASF ya son enviadas a la secretaría de la Asociación.
Asuntos Administrativos.
o Con el objetivo de mejorar y fortalecer el servicio de la Administración Central en Montevideo, asunto planteado a mediados del pasado año, el Consejo aprobó la contratación del Cr. Henry Picca con un tiempo semanal de 4 hs. dedicado exclusivamente a los asuntos de Provincia, sin desmerecer su actual dedicación como Administrador del Colegio San Juan Bautista. El contrato será hasta el término de la presente Administración y se pedirá disponibilidad para visitas a los Colegios u otros tipo de necesidades especiales.
o Aprobó una ampliación del presupuesto para finiquitar el proyecto “Solo el Amor” destinado a la recuperación de una antigua construcción emplazada en la propiedad de los Hermanos en Santa María. Finalidad del proyecto es mejorar la atención pastoral a los jóvenes, dándoles un espacio adecuado, y cuidar de la intimidad de los espacios comunitarios.
o Ante el alejamiento de su actual ocupante, consideró conveniente alquilar la antigua casa de la Comunidad en Canelones a través de una inmobiliaria local que ya gestiona el alquiler de otro bien inmueble de la Provincia en esa ciudad.
Hogar y Taller. Del 1º al 4 de marzo de 2012 tuvo lugar en el Campanero el encuentro anual “Hogar y Taller” destinado a animadores e integrantes de grupos juveniles SAFA de Uruguay. El objetivo del campamento es vivenciar dos aspectos concretos de nuestra espiritualidad: la oración (hogar) y el trabajo manual (taller). Este año estuvo enfocado hacia la Familia ya que el año 2012 ha sido declarado por la Arquidiócesis de Montevideo año de la Familia bajo el lema: “Familia, Patrimonio de humanidad”. Concurrieron 47 chicos de los colegios de San José, Canelones, Pocitos Aguada y Minas. Desde el lema "En Nazaret se trabajaba y oraba", cada día se vivió a la luz de los siguientes temas: 1er. día: Realidades familiares; 2do. día: Persona naciendo en una familia; 3er. día: Proyectos de familia como jóvenes; 4to. día: La Familia SAFA.
Encuentro anual de Hermanos y Fraternidades en San José de Mayo. Se celebró el sábado 17 de marzo en San José. Por la mañana el Diác. Fernando Rossi, de la Fraternidad de Salto, expuso de manera clara y atractiva las características del Evangelio de Marcos que es el que acompaña el presente año litúrgico. Luego hubo un trabajo por grupos. Por la tarde el equipo coordinador de las Fraternidades con la presencia de Mónica Martínez que viajó expresamente desde Córdoba para el encuentro, expuso lo trabajado en la reunión del 17 y 18 de Febrero en Montevideo con respecto al proyecto de vida de las FF NN. Se confirmaron también las demás realizaciones previstas del Retiro anual y el encuentro de noviembre. Se culminó con una misa en el patio del Colegio, presidida por el Obispo diocesano Mons. Arturo Fajardo.
Centenario del Colegio del Salvador en Santa Rosa. El pasado domingo 25 de marzo con una cuidada celebración eucarística a las 20 hs. en un hermoso templo parroquial repleto de fieles, quedó inaugurado el centenario del Colegio del Salvador en Santa Rosa confiado a los Hermanos en 1912 y donde estuvieron hasta 1939. La celebración presidida por el párroco, P. Peter Short, norteamericano pero con larga trayectoria en Argentina y 8 años al frente de esa parroquia, estuvo realzada por un numeroso cuerpo de acólitos y un conjunto de música integrado por teclado, guitarra y trompeta Concurrieron el Hno. Adelsio Delfabro, venido especialmente de Tandil, el P. Clodomiro exalumno del Colegio y del Hno. Chanel, que fue su reclutador, y el Hno. Provincial. Luego de la misa, y por invitación del párroco, un grupo numeroso de personas estimadas en unas 200, permanecieron en el templo para escuchar al Hno. Adelsio, quien - desde el ambón - ofreció a los asistentes por espacio de casi una hora algunas pinceladas de la historia del Colegio mientras desde una pantalla se mostraban imágenes de la época. El Colegio del Salvador fue la primera presencia de la Congregación en Córdoba. Un total de 56 Hermanos pasaron por esa comunidad con figuras conocidas como el Hno. Tarsicio, Esteban, Chanel, Elías, Alfonso Ma., Andrés María. Las magníficas construcciones con el gran terreno anexo fue cedido a la Congregación por 99 años. Lamentablemente con motivo de la 2ª guerra y con el pretexto de que los Hnos. franceses fueron llamados bajo bandera se cerró el Colegio a pesar del desacuerdo del Provincial de entonces, de las reiteradas gestiones del dinámico párroco Francisco Ferreira, constructor del hermosos templo parroquial, hoy Basílica Menor, y del mismo Arzobispo de Córdoba. Como consecuencia del cierre, y algún otro disgusto seguramente, el P. Ferreira vio afectada su salud mental y terminó internado en el Morra, vecino al Escuti, donde iba a pasar los días que le permitían salir especialmente domingos. La retirada abrupta de los Hermanos llevándose incluso objetos muy preciados para la Comunidad local como la campana – con que diariamente se anunciaba el comienzo de clases y que se oía en todo el pueblo - la imagen principal del Sdo Corazón y otra del Niño Jesús entre otras, profundizó el dolor causado ya de por sí por el alejamiento de los Hermanos. El Colegio permaneció un tiempo cerrado, luego estuvieron los Padres de la Salette por breve tiempo, sufrió luego nuevo cierre y desde hace algunas décadas funciona como Colegio Parroquial dirigido por laicos. El monumental edificio ha sufrido grave deterioro a lo largo de los años por los períodos de cierre y por la imposibilidad de hacerle mantenimiento. Actualmente, el párroco P. Peter Short se ocupa, con aportes locales y sobre todo donaciones del exterior de recuperar lentamente las instalaciones e incluso de ampliarlas. Actualmente el Colegio, que goza del aporte estatal, tiene unos 700 alumnos con un doble turno primario cobrando una cuota de $A 30 en Primaria y $A 120 en secundaria. El Colegio del Salvador tuvo el primer “Nacional” de los Hnos. en Argentina y fue internado reconocido en la zona. En sus mejores años oscilaba entre 100 y 150 pupilos. Recibió también algunos aspirantes incluso de Montevideo siendo así precursor del aspirantado de Alta Córdoba (1920) y del Colegio de la Inmaculada (1942) .
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Febrero 2012 - COMUNICACIÓN Nº 13 - PCIA. NTRA. SRA. DE LA ESPERANZA
El 19 de febrero a las 9,00 en la Parroquia “San José” de Passo Fundo, en una celebración cuidadosamente preparada, con la animación del coro del Hno. Sergio de Marau, acompañados por familiares, Hermanos, amigos, y por la Comunidad cristiana local los novicios Juan José Gordillo y Gastón Píttaro hicieron su 1ª profesión religiosa como Hermanos de la Sagrada Familia.
La fiesta continuó después, en un día particularmente caluroso, con un almuerzo a la canasta bajo la frondosa sombra de pinos de una de las avenidas del parque del centro Gabriel Taborin.
Un clima de acción de gracias al Padre de todo don, de alegría y sencillez nazarena , de fraternidad y gratuidad marcó la tónica de la jornada. Posteriormente, mientras los Hermanos, amigos y simpatizantes venidos de diversas comunidades regresaban a sus casas, los noveles Hermanos también se dirigieron a la de sus respectivas familias para compartir con ellas unos días.
En la noche del 16 de enero partieron desde Córdoba 4 Hermanos y unos 40 jóvenes bien dispuestos a la Misión que año a año se realiza en los Valles Calchaquíes, al llegar a Santa María se reunieron con otros 15 jóvenes del lugar.
Agrupados por comunidades durante 10 días visitaron y realizaron diversas actividades en los siguientes asentamientos: Toro Yaco, San Antonio y La Hoyada en los cerros; y en el valle en Puntas de Balasto, Quilmes, El Puesto, El Paso, Famatanca y San José Banda.
Entre el 1º y 6 de febrero tuvo lugar en Baltasar Brum (Dpto Artigas) la misión animada en esta ocasión por un equipo del San Juan. Fue una ocasión para acompañar la marcha de la Cdad cristiana de ese pequeño poblado y percibir el compromiso de la gente del pueblo integrados en Cdades Cristianas de Base.
Como es habitual todos los años en el mes de febrero no faltan las propuestas de formación para el personal directivo, docente y no docente de nuestras Comunidades educativas.
Así, entre el 9 y 11 de febrero tuvo lugar en S. Antonio el encuentro de Directivos de la ASF, que fue precedida de la reunión de la Comisión Directiva de la Asociación en un lugar cercano. Unos 40 participantes se dieron cita para profundizar en aspectos de recursos humanos y dinámicas de grupo con el acompañamiento de dos asesores externos. Fue la ocasión también para compartir con ellos “Perspectivas del año 2012” en base a lo trabajado por los Hermanos en la Convivencia de S. Antonio.
El lunes 13, en el Colegio San Juan Bautista entre 180/200 docentes se dieron cita para la primera jornada de formación del año. El Area o Equipo de Animación de Educación, hizo una presentación dinámica y muy acertada del nuevo Proyecto Educativo del Instituto. Luego el Provincial se extendió en la presentación de familias carismáticas, familia SAFA y Perspectivas 2012.
Ese mismo día, en la Comunidad Vicente Barreix, tuvo lugar en Montevideo la reunión de la asesora pedagógica Fabiana Cáceres del Cefyt con los redactores del Curso a Distancia “Como el grano de mostaza” sobre la vida del Hno. Gabriel y el desarrollo histórico del carisma. Igual reunión se celebró días después, concretamente el miércoles 22, en Córdoba. Como resultado se piensa que para fines de marzo quedaría terminada la redacción de los textos.
Algunos Hermanos y laicos han manifestado interés en oficiar de tutores cuando se largue el curso hacia mediados de año. Los mismos recibirán un entrenamiento “on line”. La propuesta sigue abierta si alguien más quiere sumarse en este servicio.
Se ha concretado la anunciada participación del Hno. Miguel Vargas en el Curso de Formadores en Santiago de Chile, al ser aceptado en el mismo. Actualmente se ocupa de resolver problemas consulares y de radicación. El comienzo está previsto para el 13 de marzo en la sede de la Conferre de Santiago, finalizando el 14 de diciembre. Desde ya nos comprometemos acompañarlo con la comunicación frecuente, la oración y le deseamos una fructífera estadía.
Por su parte el Hno. Carlos Raco ha comenzado a fines de enero en el Instituto Centroamericano de Espiritualidad de Guatemala su tiempo de formación y actualización. El inicio ha sido muy positivo habida cuenta de la intensa actividad desplegada en los últimos tiempos. Lo tenemos presente en nuestra oración y nos encomendamos a las suyas en este tiempo de mayor calma y serenidad.
El P. Daniel Sturla sdb, nuestro exalumno del San Juan será consagrado Obispo el próximo domingo 5 de marzo en la Catedral Metropolitana de Montevideo. Lo acompañamos con nuestra oración pidiendo para él la fortaleza y la sabiduría del Espíritu en su nuevo ministerio.
El sábado 17 de marzo tendrá lugar el encuentro anual de Fraternidades y Hermanos de Uruguay en San José de Mayo. El tema central será una reflexión sobre el Evangelio de Marcos que acompaña la liturgia de este año, a cargo del Diac. Fernando Rossi.
El lunes 19, fiesta de San José, a las 9 hs. será la inauguración de la OPE-SAFA en Santa Lucía precedida de una reunión de socios en Tucumán. De allí el Consejo Provincial seguirá para hacer la visita a Santa María, comenzando así la visita a las Comunidades de la Provincia y celebrará su reunión ordinaria mensual.
El acompañamiento de esta nueva presencia SAFA estará a cargo del Hno. Juan Carlos en lo que tiene que ver con la Comunidad Animadora y el Hno. José Sánchez con el Equipo Coordinador de la OPE-SAFA. Para los casos de pastoral juvenil recurrirán al Hno. Fernando León. El Provincial será referente de la manera habitual que lo hace con las comunidades de la Provincia.
El último fin de semana del mes , 25 y 26 de febrero, contaremos con la visita del Hno. Alberto Carro que animará un encuentro sobre Eneagrama en Piedras Blancas para un grupo de adultos que vienen reuniéndose en Montevideo con la inquietud de concretar una realización carismática de orden social, en el ámbito de la niñez y adolescencia más vulnerable.
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Villa Sagrada Familia, 16 de enero de 2012 - INVITACION A LA PROFESION RELIGIOSA DE NUESTROS NOVICIOS
A los Hermanos, Fraternidades Nazarenas, socios de la ASF, Directivos, miembros de los Equipos de Animación y Comités, educadores, amigos y amigas de la Familia SAFA:
Seguramente estarán disfrutando en este tiempo de unas bien merecidas y reparadoras vacaciones, en familia. No faltarán, en algunos casos, situaciones personales o familiares de dolor por circunstancias físicas, afectivas o vinculares que ponen a prueba nuestra fe y confianza en el Señor y en las personas. Que en toda circunstancia no dejemos de sentirnos unidos y ser testimonio de querer vivir “bajo el humilde techo de Nazaret”.
Con alegría vengo a anunciarles que el próximo 19 de febrero harán su primera profesión religiosa en Passo Fundo los novicios Juan José Gordillo, de Canelones (Uruguay) y Gastón Píttaro de Buenos Aires. Los hacen al final de la etapa de noviciado que es la etapa fundamental de la formación del Hermano.
Durante este año se han preparado, con el estudio y práctica progresiva de la vida religiosa, en un ambiente especialmente favorable a la reflexión y la plegaria, a la entrega total de sí mismos a Dios mediante la profesión de los votos religiosos.
La profesión de los votos religiosos, como dicen nuestras Constituciones HSF, llevan a cabo la totalidad de un amor entregado a Cristo y los hermanos que va más allá de los afectos propios, los bienes propios y la voluntad personal.
Quieren que los acompañemos sobre todo con nuestra oración desde el sitio donde nos encontremos. En ese día o en la víspera podremos propiciar un tiempo de oración comunitario, sea a nivel de Hermanos, Fraternidades o Cdad Educativa, juntos o separados, para dar gracias a Dios porque el Señor sigue cautivando y enamorando en su seguimiento a los jóvenes y porque estos son capaces de una respuesta generosa y atrevida para nuestro tiempo. Por eso precisan de la oración de todos.
Algunos seguramente querrán hacerse presentes a pesar de la distancia. En este caso contactar con los Hermanos de la Comunidad.
Como Familia SAFA estamos llamados a acompañarlos espiritualmente y no solo ahora sino a lo largo de todo el proceso de esta nueva y fundamental etapa más o menos larga llamada de votos “temporales”, ya que serán renovados anual o trienalmente hasta la profesión perpetua entre seis y nueve años después.
Nuestra oración, que ha sido fundamento del Instituto y como decía el Hno. Gabriel “será una de las columnas más fuertes para mantenerlo”, debe elevarse permanentemente por las vocaciones de Hermanos y de toda la Familia SAFA: vocación a las Fraternidades Nazarenas, vocación al servicio en las Cdades Educativas SAFA sea como socio ASF, directivo, docente, catequista, animador pastoral, animador juvenil o misionero.
El Plan de animación Vocacional Provincial, Familia SAFA, que estamos gestando para este año, pretende poner de relieve estas diversas vocaciones dentro de nuestra familia carismática. Por eso pensamos en realizaciones a nivel local tales como “Semanas Vocacionales Familia SAFA” que podrán ser realidad en la medida que todos nos sintamos involucrados por el Espíritu nazareno y de familia que nos anima. También, y en esta misma línea, está en marcha un proyecto juvenil de animación para jóvenes “supra 20” de nuestras comunidades que oportunamente será dado a conocer.
Que todas estas realizaciones vocacionales animen nuestra oración confiada y constante ante el Padre de la mies para que envíe los operarios que se necesitan. Que iniciando el año con estas dos profesiones de Hermanos y “comprometidos con la esperanza” que toda vocación en la Familia SAFA despierta en la sociedad sea este un gran año vocacional en nuestra Provincia.
Que la Sagrada Familia y el Hno. Gabriel bendigan a nuestros novicios y sus formadores, a cada uno de ustedes y nos ayuden a todos a concretar estos buenos propósitos para este año.
Hno. Néstor Achigar
Provincial
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Villa San Antonio, 6 de enero de 2012 - CONVOCATORIA AL CAPITULO PROVINCIAL
Queridos Hermanos,
miembros de las Fraternidades,
socios de la Asociación Sda. Familia, Directivos,
miembros de los Comités y Equipos de Animación:
En tradicional fiesta de la epifanía o “de Reyes” tan apreciada por nuestros niños, y especialmente significativa para nuestra familia carismática, vengo a hacer la convocatoria para el próximo Capítulo provincial.
Como lo piden nuestro derecho particular debe celebrarse uno antes del Capítulo General y otro después. Será el primero de la nueva Provincia “Ntra. Sra. de la Esperanza”. Como lo establecen nuestras Constituciones, “El Capítulo provincial es una asamblea representativa que ejerce el poder normativo de la Provincia, dentro de los límites de la Regla y de las disposiciones del Capítulo general o del Consejo general”. (C.214)
En el tiempo indicado por el Consejo procederemos a la elección de Hermanos delegados cuyo número será de nueve superando así en dos a los de derecho. Siguiendo lo que ya es práctica entre nosotros comportará la participación de laicos de la Familia SAFA con unos criterios establecidos por el Consejo después de consultar a todos los Hermanos.
Así se ha determinado que participarán por las Fraternidades Nazarenas, la coordinadora y un miembro del Equipo por cada país, (3), el presidente y vice de la ASF (2), un miembro por cada Comité apostólico (3), uno por cada Equipo de Animación (5), 1 representante por las Cooperativas, 1 representante de la Asamblea de Directivos y 1 representante del Consejo Directivo provincial.
La fecha de comienzo está fijada para el 4 de julio de 2012 en el Escuti. Para la preparación de este importante asamblea, contamos con el aporte de las comisiones de Hermanos, las Fraternidades Nazarenas, la Asociación, los Directivos, los equipos de animación y los comités. Los informes que cada uno de estos integrantes de la familia SAFA será una ayuda valiosa en el ver de nuestra realidad y las orientaciones de futuro a asumir.
Invito a invocar frecuentemente al Espíritu en el tiempo que nos separa de la iniciación de esta asamblea de familia, para ser dóciles a sus inspiraciones y para que en todo busquemos la voluntad de Dios en todas las cosas. Así como nuestra Provincia religiosa podrá llevar por todas partes el buen olor de Jesucristo como soñaba el Hno. Gabriel y ser una buena noticia para la sociedad y la Iglesia de hoy, como lo fue Jesús para los magos de orienta en la festividad que hoy celebramos.
Que la Sagrada Familia y el Hno. Gabriel nos bendigan y acompañen
Hno. Néstor Achigar
Provincial
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Montevideo. 5 de enero de 2012 - COMUNICACION DE LAS COMUNIDADES DE HERMANOS PARA ESTE AÑO 2012
Un deseo de feliz año y fiesta de la Epifanía a todos!
Les hago llegar, junto a un cordial saludo, las Comunidades de Hermanos 2012
Hno Nestor
Sagrada Familia (Aguada): Hermanos: Victorino Izquierdo, Juan Bosco Correa, Juan José Hernando, Francisco Godino, José Mario Dipacce, Javier González, Ricardo López.
Superior: Hno. José Mario Dipacce.
Administrador: Hno. Ricardo López
Sagrada Familia (San José): Hermanos: Rogelio Dewaele, Ernesto Cordero, Alejandro Salvatierra
Superior: Hno. Rogelio Dewaele,
Administrador: Hno. Alejandro Salvatierra
Sagrada Familia (Salto): Hermanos: Manuel Alves, Germán Camarero, Edgardo Bruzzoni
Superior: Hno. Edgardo Bruzzoni
Administrador: Hno. Manuel Alves
San José (Tandil): Hermanos: Adelsio Delfabro, Valentín Vilca, Mario Fierro
Superior: Hno. Valentín Vilca
Administrador: Hno. Mario Fierro
Vicente Barreix (Pocitos): Hermanos: Héctor Da Rosa, José María de la Fuente, Aurelio Arreba
Superior y administrador: Hno. José María de la Fuente
Escuti (Córdoba): Hermanos: Jesús Elvira, Héctor Emilio Almada, Fernando Mallo, Néstor Achigar
Superior: Hno. Néstor Achigar
Vice superior y Administrador: Hno. Fernando Mallo
Escuti (Córdoba) Casa de formación: Hnos: Juan Carlos León, José Mamerto Sánchez, Miguel Vargas, escolásticos Hnos. Juan José Gordillo y Gastón Píttaro, postulante Ruben Cardozo y aspirante Jonathan Guzmán.
Superior: Hno. Juan Carlos León
Administrador: a designar
Sagrada Familia (Buenos Aires): Hermanos: José Lahoz, Victorino Lázaro y Miguel del Corro.
Superior: Hno. Victorino Lázaro
Administrador: Hno Miguel del Corro
Santa María (Catamarca): Hermanos: Juan Andrés Acosta, Tarcisio Pateta, Alejandro Ferrer, Fernando León
Superior: Hno. Fernando León
Administrador: Hno. Juan Andrés Acosta
Curso de renovación en Guatemala: Hno. Carlos Raco
Filipinas: Hnos. Edgardo Campos
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Roma. 5 de noviembre de 2011 - CARTA DEL SUPERIOR GENERAL CON MOTIVO DE LA CELEBRACION DEL MES ANIVERSARIO DEL HNO. GABRIEL TABORIN
“Llevar por todas partes el buen olor de Jesucristo”
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, Aspirantes a Hermanos, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas, Catequistas y amigos de la familia Safa:
Con la recomendación del Venerable Hermano Gabriel Taborin de “llevar por todas partes el buen olor de Jesucristo” (Testamento Espiritual), os envío este saludo en la conmemoración del ciento cuarenta y siete aniversario de la muerte del Hermano Gabriel Taborin.
La frecuencia de esta cita en los escritos del Hermano Gabriel, tomada de San Pablo (2Cor.2, 15-16) y muy generalizada por la Escuela Francesa de Espiritualidad y en particular por San Francisco de Sales, nos invita a preguntarnos cómo manifestar la fragancia de Jesucristo en los ambientes donde vivimos. Tres imágenes bíblicas pueden ayudarnos en nuestro propósito: la de la luz, la del fuego y la de la sal.
La imagen bíblica de la luz para iluminar se ajusta bien a la realidad de llevar el olor de Jesucristo. La luz permite enfocar bien nuestras vidas. Con la luz nos centramos en lo principal y primordial. Cuando se tiene la debida luz para enfocar bien nuestra vida y misión se deja a un lado lo que deslumbra y la apariencia. Además con la luz de Jesucristo podremos responder a los compromisos de la vida y de la misión por nuevos y difíciles que estos sean porque con la luz de Jesús los problemas de siempre pueden tener respuestas nuevas y más adecuadas.
La metáfora repetida en la Biblia de ser fuego nos habla de la energía que debemos poner en nuestra vida para que el Reino llegue. El fuego en el lenguaje bíblico representa no solo la presencia de Dios sino también la pasión del corazón. Por eso nos dirá San Pablo 2 Tim 1,6: “avivad el fuego del don de Dios que está en vosotros”. El servicio de la entrega de nuestra vocación Safa empapada por la lógica del evangelio será fuego del Reino que se manifieste más por el modo de ser que por el hacer.
Ser sal en esta tierra significa que debemos vivir en consonancia con los valores del Reino. La sal no pasa desapercibida al gusto de nadie. Sabor, salud, vida y permanencia son significados que damos al símbolo de la sal pero si la sal pierde el sabor ¿cómo lo puede recuperar? Recuperar la sal de la vida pasa por una concentración en lo esencial: poner en el centro el amor a Dios y a los hombres.
El contenido de las tres imágenes nos puede ayudar a poner en práctica la invitación del Hermano Gabriel a llevar el “buen olor de Jesucristo” y lo seremos si el contacto con nosotros genera esperanza, alegría e ilusión. Seremos también fragancia de Cristo si nuestro trato y presencia son atractivas, si la gente se encuentra envuelta en un aroma de acogida, de fraternidad, de espontaneidad, de simplicidad, de hospitalidad, de ternura y de aprecio. Quien visite nuestras comunidades, nuestras instituciones y nuestras familias percibirá sin duda las esencias de este perfume.
Por el contrario no seremos fragancia de Cristo si hemos de justificar y acreditar con bonitos discursos la bondad y la verdad de nuestro carisma o si el gesto de nuestra vida es una señal difusa, ambigua e indescifrable. Tampoco seremos fragancia de Cristo si de nosotros brota el descontento, el cansancio o el mal humor.
Una manera posible de llevar “el buen olor de Jesucristo” sería el hacernos eco de la recomendación que el Hermano Gabriel hacía a los Hermanos y que hoy bien podemos hacer extensiva a todos los miembros de la Familia Safa: “Que no se vea ni se oiga jamás en ninguna parte a un Hermano de la Sagrada Familia sin ser mejor o quedar edificado” (NG 331).
Para el Hermano Gabriel el evangelio fue una forma de vida, una exigencia y una práctica. Acercarnos a la vida del Hermano Gabriel es pues ponernos frente a la escena del Sermón de la Montaña, del mandamiento del amor y de “todos vosotros sois hermanos”. La historia del Hermano Gabriel es el relato de la tensión siempre presente entre los criterios del mundo y los valores del Reino.
Por eso mismo algunos de sus contemporáneos -familiares, amigos, gente acomodada, clérigos-, intentaron desanimarlo de sus propósitos y lo acusaron de poco realista y de utópico sin llegar a comprender que solo lo que parece imposible para los hombres acaba por lograr lo que sí es posible con Dios. El Hermano Gabriel quiso hacer realidad aquellas palabras del Señor: “mi madre y mis hermanos son los que escuchan la palabra y la ponen en práctica”. (Lc. 8,21).
Así pues el mejor homenaje que podemos ofrecer para honrar a nuestro Venerable Fundador en la conmemoración de su fiesta es hacer lo que él hizo: creer en la Palabra de Dios y ponerla en práctica. Sólo así seremos sal, luz y fuego y podremos llevar por todas las partes “el buen olor de Jesucristo”.
Sintiéndonos unidos al Venerable Hermanos Gabriel no olvidemos, especialmente en este mes:
- Recordar la Causa de Beatificación en los ambientes donde vivimos.
- Poner a disposición todo el material de animación y propaganda de que disponemos: imágenes, pequeñas ilustraciones, artículos interesantes, escritos, libros, tebeos, etc.
- Presentar los nombres de las personas enfermas o en dificultad para pedir al Señor por sus necesidades por mediación del Hermano Gabriel.
- Dar a conocer la oración para pedir su beatificación y recopilar las gracias y los favores recibidos.
- Implicar a cuantas personas estén en contacto con nosotros en la difusión de la vida, obra y fama de santidad del Venerable Hermano Gabriel Taborin..
En el prólogo de las Constituciones de los Hermanos de la Sagrada Familia leemos: “El Hermano Gabriel permanece entre nosotros…, te corresponde asegurar su presencia, realizar y transmitir su mensaje y multiplicar sus discípulos por medio de tu vida de fe, de esperanza y de caridad”.
Con ocasión de los diferentes actos que se celebren a lo largo del mes en memoria del Venerable Hermano Gabriel, invito a todos los miembros de la Familia Safa a asumir con alegría los siguientes compromisos:
- estar dispuestos a seguir a Cristo a pesar de las dificultades;
- entregarnos con generosidad al servicio de los demás;
- hacer de la Palabra y de la oración la fuente de nuestro misión;
- y a tener presente que “bajo el techo de Nazaret aprendamos la sabiduría que nos guíe en la vida”, según la expresión de nuestro Fundador.
Demos gracias a Dios por la persona del Venerable Hermano Gabriel Taborin y procuremos que su vida, sus escritos y su espiritualidad sean estrella y guía en el caminar de toda la Familia Safa.
Feliz fiesta.
H. Juan Andrés Martos Moro SG
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Córdoba 15 de agosto de 2011 - Solemnidad de la Asunción de María
NOMBRAMIENTO DEL NUEVO EQUIPO COORDINADOR
Queridos hermanos y hermanas de las Fraternidades Nazarenas:
En este día que la Iglesia conmemora la solemnidad de la Asunción de María en cuerpo y alma a los cielos, vengo a comunicarles los nuevos integrantes del Equipo Coordinador de las Fraternidades Nazarenas en nuestra Provincia. Antes, quiero agradecer la buena disposición de todos en responder al sondeo. Todas las Fraternidades respondieron sin excepción.
Deseo también agradecer a quienes hasta ahora brindaron este servicio a la comunidad de Fraternidades : Susana Sambolino, Memi Crotti y Washington Rocca por la ex provincia San José y Mónica Martínez, Rita Fochi y Mario Starodusky por Ntra. Sra de Luján. Agradezco también a los Hnos. Germán Camarero y Victorino Lázaro, que se han desempeñado como asesores de los respectivos equipos de coordinación en el último trienio.
Conforme a lo conversado oportunamente, dentro de lo que establece el art 25 del Plan de Vida, y de acuerdo a la nueva realidad de la Provincia hemos conformado un Equipo Coordinador un poco más amplio con dos “consejeros” por cada una de las ex Provincias, como para que más allá de las reuniones plenarias, se pueda acompañar mejor las instancias concretas a nivel local.
El nuevo equipo, estará conformado con Mónica Martínez como Coordinadora, integrante de la Fraternidad Taborin. Estará acompañada por:
• Edgardo Duarte de la Fraternidad Aguada
• Haydée Galotto de la Fraternidad de Tandil
• Daniel González de la Fraternidad San Juan Bautista
• José Daniel Rego de la Fraternidad de Buenos Aires.
Misión del equipo coordinador sera mantener la unidad de las Fraternidades, promover actividades concretas a nivel provincial, preparar una reunión anual de encuentro, formación y compromiso, siempre que sea posible y mantener contactos con los Superiores del Instituto y con las Fraternidades de otras Provincias. (Art 25). El Consejo Provincial no designó aún el Hermano Asesor. En el comienzo de esta nueva andadura, el acompañamiento estará a cargo del Hno. Provincial.
Felicitamos al nuevo equipo coordinador por la confianza depositado en ellos de parte de los miembros de las Fraternidades. Le deseamos que inspirándose en la disponibilidad de María, Ntra. Sra. de la Esperanza, que supo dar un sí generoso al Padre, y el ejemplo de José, que como responsable de la familia “desempeñó su cometido con prudencia, valor y lucidez” (C. 146) puedan cumplir su misión con sencillez, humildad y alegría.
Que nuestros santos patronos Jesús, María y José y el Hno. Gabriel los acompañen y bendigan
Hno. Néstor Achigar - Provincial
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16 de julio de 2011 - NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA
COMUNICACIÓN Nº 8
(Julio 2011)
El Consejo Provincial tuvo su reunión mensual en Montevideo, el domingo 26 de junio. La reflexión inicial se desarrolló en torno a la Animación vocacional basados en un documento de la última Asamblea CONFRU que retomó la temática del II Congreso Continental Latinoamericano de Vocaciones celebrado en Costa Rica en enero 2011.
En esta ocasión nos detuvimos en las “luces y sombras” de la Pastoral Vocacional enriqueciéndolo con nuestra propia reflexión.
Al día siguiente lunes 27 se hizo la visita al Colegio San José de Minas. A pesar de haber coincidido con el período de vacaciones igualmente el Consejo pudo encontrarse con representantes de las dos Cooperativas (CO.DO.MI y CO.PRO.MI) que gestionan el centro.
Se acordó nombrar una comisión integrada por el Director de Secundaria Prof. E. Ayala, el Director de primaria, Maestro A. y el Hno. Javier para negociar diversos problemas surgidos con el Club SAFA de baby fútbol que utiliza un sector de las instalaciones y las canchas.
Por la tarde el Consejo se desplazó hasta el Campamento Campanero donde pudo apreciar algunas mejoras como el nuevo quinchado de lo que llamamos “el gusano”, edificación que está entre el hexágono y “la casa de los Hermanos”.
Objetivo de la visita era seguir evaluando el resultado de las negociaciones sobre el tema del camino de entrada, que como se sabe está parcialmente suspendido en uno de sus tramos. Para ello se citó al asesor letrado para estudiar “in situ” las posibilidades inmediatas y mediatas que tenemos. El Consejo seguirá evaluando los pasos a seguir además de los ya dados, con la posibilidad de lograr una entrevista con la parte en cuestión.
El martes 28 el Consejo se desplazó hasta San José de Mayo. Allí tuvo por la mañana un encuentro con el Consejo de Dirección, por la tarde ajustó la agenda de visita del Superior General, preparó la reunión con la Asamblea de Directivos a realizarse al día siguiente, aprobó el Proyecto de Vida de la Cdad local y abordó temas económicos: aprobación de balances y algunos presupuestos de los Colegios y Cdades de Uruguay. A última hora tuvo la reunión con la Cdad de Hermanos, compartió la Eucaristía y la cena y regresó a Montevideo.
El miércoles 29 los miembros del Consejo se reunieron en el Colegio San Juan Bautista con los Directivos de Uruguay y los Coordinadores de los Equipos de Animación o “áreas”: Catequesis, Pastoral Juvenil y Vocacional, Educación y Animación de la Causa del Hno. Gabriel.
Motivo principal del encuentro fue preparar una nueva instancia de la misión compartida cual es la integración, según las disposiciones del último Capítulo Provincial, de un Consejo Directivo Provincial integrado por Hermanos y laicos, que asumiría algunas de las funciones que actualmente cumple el Consejo Provincial en la animación y dirección de las Cdades Educativas del Uruguay.
Una de las dinámicas consistió en “hacer memoria” del camino de misión compartida recorrido en los últimos años. Para ello se fue ubicando en una línea de tiempo los diversos pasos dados a nivel eclesial, congregacional y provincial: de la colaboración a la corresponsabilidad.
Luego se iluminó lo trabajado en grupos desde la perspectiva de las familias carismáticas, entendidas como conjuntos formados por instituciones y grupos de creyentes unidos por un mismo carisma fundacional o “raíz carismática” pero con estados de vida diferentes y con diversas acentuaciones del mismo carisma.
Finalmente se puso a consideración la propuesta concreta del Capítulo Provincial de la ex Provincia “San José” expresadas en los Nos 40 y 41 del Directorio Provincial y se pidió que se identificaran las nuevas oportunidades que este paso significaría, sugerencias sobre la implementación de la misma, dificultades previsibles, y pasos a seguir. La asamblea sugirió que se continúe trabajando el tema previendo la puesta en marcha para el próximo año.
El miércoles 29 por la tarde el Consejo se reunió en la Cdad Vicente Barreix para aprobar los presupuestos del Instituto de Vida Consagrada. Particular destaque para la remodelación del viejo escolasticado con la finalidad de trasladar allí la casa de formación.
Se aprobó también la puesta en marcha de un curso a distancia de iniciación en el carisma para docentes nuevos. El mismo busca sumar una respuesta más a lo que se viene haciendo a nivel provincial y local sobre este tema.
Sería un curso con temas quincenales y 3 meses de duración. Supondría algunas instancias presenciales. Varios laicos “de ambas márgenes” vienen colaborando. En este caso se aprobó la firma de un convenio con el Departamento de Educación a Distancias del CEFyT para instrumentar el curso. El mismo supone la diagramación y organización del material, el armado de la cartilla de actividades e interactividades, la edición y diseño del material, la capacitación de los tutores, el seguimiento y monitoreo del proyecto, las inscripciones y conformación de las aulas virtuales. En principio la puesta en marcha estaría prevista para Marzo 2012.
RETIRO FRATERNIDADES NAZARENAS. El 25 y 26 de junio tuvieron su retiro anual en Florida las Fraternidades Nazarenas de Uruguay bajo el lema “Anunciamos impulsados por el Espíritu”. Unos 40 participantes vivieron intensamente este momento de espiritualidad acompañando a quienes hicieron sus compromisos por primera vez (2), los renovaron temporalmente (8) o los pronunciaron para siempre (5).
El 29 de junio salieron en peregrinación a la tierra del Fundador el Hno. Javier y José María acompañando un grupo de 27 jóvenes de los grupos de la Aguada con algunos animadores.
El 6 de julio llegó de Roma el Hno. Tarcisio integrándose nuevamente a la Provincia después de una estadía de tres años en la Cdad de Belley y un curso de espiritualidad en Roma.
El 2 de junio el Superior General ha comenzado en Buenos Aires la visita canónica a las comunidades de la Provincia. Acompañemos con nuestra oración este acontecimiento para que sea un momento de gracia para la nueva Provincia.
Tandil, 8 de julio 2011
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30 de junio de 2011 - REFLEXION SOBRE EL NUEVO NOMBRE DE LA PROVINCIA
Sobre el nuevo nombre de la Provincia
“La esperanza es la que todo lo arrastra consigo
porque la fe ve aquello que existe,
mientras que la esperanza de lo que existirá” . Ch. Peguy
“Porque solamente en esperanza estamos salvados porque
cuando se ve lo que se espera, ya no se espera más” Rom.8,24.
El nombre de la nueva Provincia despierta la simpatía de muchos y es visto también como una gracia. A medida que se difunde su nombre, observamos la espontánea adhesión, hasta un tanto sorprendida, de muchos y muchas de Vds. Acabamos de recibir un correo donde alguien comenta simplemente: “precioso nombre, me encantó”. Y formula votos para que “nos siga llevando de la mano y nos dejemos conducir por Ella”.
Llegó providencialmente: después de búsquedas y consultas, siempre de escaso consenso. La unión de las antiguas provincias religiosas, trascendiendo los límites geográficos, nos llevó a vernos en primer lugar como parte de una unidad más grande, cuál es el continente latinoamericano; luego, la búsqueda de una advocación mariana siguió orientando nuestro camino.
Al pensar con mentalidad continental, nos vino a la mente la conocida expresión con que tanto Pablo VI como Juan Pablo II identificaron esta porción del mundo como el "continente" de la esperanza. Así fue llamado por el Papa Pablo VI, hace cuarenta años, en el 1968. El mismo Pontífice había ya explicado el contenido de esta esperanza en su homilía del 3 de julio de 1966, en la basílica de San Pedro, poniendo en relieve "la original vocación" de América Latina de "plasmar en una síntesis nueva y genial lo antiguo y lo moderno, lo espiritual y lo temporal, lo que otros te han dado y tu propia originalidad", para dar "testimonio" de una "novísima civilización cristiana".
Juan Pablo II retomó varias veces esta definición. Lo hizo en su primer viaje apostólico, en México, durante la inauguración de la III Conferencia Gral. del Episcopado Latinoamericano, a Puebla de los Ángeles (enero de 1979), desarrollándolo en particular modo en Santo Domingo, el 12 de octubre de 1984. Benedicto XVI mantiene esta tradición, y a la víspera de su primer viaje a América Latina, en Brasil, habló precisamente de esta tierra como del "continente" de la esperanza, el 6 de mayo de 2007, usando sucesivamente otras tres veces esta definición.
La conocida canción “Virgen de la Esperanza” inspirada en una celebrada oración del Cardenal Eduardo Pironio terminó de plasmar en realidad la ansiada búsqueda que se había extendido por más de un año. Estamos en el “continente de la esperanza” y María es signo de esperanza para el pueblo sencillo y fiel. Desde siempre ha sido invocada como “vida, dulzura y esperanza nuestra”; como “estrella de la mañana, salud de los enfermos, refugio de los pecadores, consuelo de los afligidos y auxilio de los cristianos”.
Ella ha mantenido viva la fe en las familias y en el pueblo creyente y pobre carente, muchas veces privado por distancias físicas o culturales de una atención pastoral adecuada. Desde los diversos santuarios o la variedad de advocaciones atrae continuamente la simpatía de una multitud de creyentes a quienes conduce misteriosamente a su Hijo Jesús. “Desde los orígenes, nos recuerda Puebla, María constituyó el gran signo del rostro maternal y misericordioso, de la cercanía del Padre y de Cristo con quienes nos invitar a entrar en comunión”. (282)
Que desde Nazaret, como ella, apasionados por el Reino, fortalecidos por el Espíritu, nos sintamos nuevamente enviados como “discípulos misioneros” por las Galileas de nuestro tiempo para ser testigos de la compasión y el amor misericordioso del Padre.
Hno Néstor Achigar
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Junio de 2011 - CARTA DEL HERMANO SUPERIOR GENERAL N°. 8
“la vida de Jesús, María y José, como familia,
será para los Hermanos su punto de referencia” C.7
Estimado Hermano:
Con ánimo de seguir manteniendo el servicio de animación que me ha sido encomendado, te envío esta nueva carta para que sigas reflexionando sobre el lugar que ocupa la Sagrada Familia en tu vida espiritual y cómo la tienes presente en la misión que realizas. Me mueve a ello la reciente publicación del “Manual de Espiritualidad de la Familia Safa”, elaborada por el H. Teodoro Berzal Martín, en la que se ponen de relieve “los vínculos que nos unen a Jesús, María y José”, según la expresión del Venerable Hermano Gabriel Taborin.
Un texto que, en mi opinión, sistematiza los elementos esenciales de nuestra espiritualidad, resalta el patrimonio de nuestra tradición, profundiza en el misterio de Nazaret, explica nuestra trayectoria espiritual como Instituto, ofrece un itinerario de relación con Dios y con los hombres, y nos señala un posible camino de santificación.
Por todo ello, te invito a leerlo y a estudiarlo para que el esfuerzo colectivo que se ha puesto en su elaboración dé los mejores frutos. Utilízalo como apoyo y recurso de tu oración personal, de tu meditación y de tu lectura espiritual diarias. Medítalo con mente abierta y pide la ayuda del Espíritu para llegar a descubrir las aspiraciones más profundas que subyacen en sus páginas. Sólo cuando el corazón y la mente son sensibles a la acción del Espíritu empiezan a tomar relieve expresiones e ideas que con anterioridad pasaban desapercibidas.
Explicitar nuestra espiritualidad ha sido uno de los compromisos del Instituto durante este sexenio y es mi deseo que ocupe también un puesto destacado en la programación de todas nuestras Comunidades. Aunque sabemos por experiencia que la vida espiritual depende más del cambio de corazón que de las exposiciones teóricas de los tratados.
Ahora no es mi intención referirme ni comentar los aspectos doctrinales del Manual que te serán fáciles de percibir. Mi objetivo como te decía al principio, es llamar tu atención para que intensifiques tu cercanía a la Sagrada Familia y sea fuente constante de apoyo en tu misión. Esto te ayudará a hacerla presente y viva en la Comunidad y a tributarle un culto particular de amor, de invocación y sobre todo de imitación, como corresponde a nuestros orígenes. Estoy convencido de que así recuperaremos la importancia que ella tuvo para nuestro Fundador y daremos un fuerte impulso a la fidelidad carismática del Instituto. Una recuperación que quizás debiéramos potenciar.
Con esta intención pongo a tu consideración en esta carta, algunas reflexiones sobre la presencia de la Sagrada Familia en la vida del Hermano Gabriel, presencia -que en mi opinión- motivó en él una profunda adhesión a la persona de Jesús en su vida de familia junto a María y José. También me permitiré hacer algunos comentarios y exhortaciones fraternas con el fin de que dicha presencia siga influyendo en nosotros, sus seguidores. Confío que entre tus muchas obligaciones, tengas tiempo para leerla.
Conoces bien cómo nuestro Fundador y los Hermanos que nos han precedido se ponían frecuentemente “bajo el amparo de la Sagrada Familia”. Lo manifestaban cada día en la oración comunitaria, en las invocaciones, en los cantos y en otros muchos ejercicios de piedad. Y aunque no tenemos que repetir las mismas prácticas del pasado, no debemos olvidar de dónde venimos y cuáles son nuestras raíces, porque el Señor no nos ha llamado a la vida religiosa de una forma genérica sino que, somos religiosos siendo Hermanos de la Sagrada Familia. Te invito pues a potenciar y testimoniar esta identidad.
Sería oportuno que todos nosotros hiciéramos un esfuerzo personal y colectivo para seguir progresando en el conocimiento y aprecio de nuestra espiritualidad y -también por supuesto de nuestra historia- y lo consideráramos como posibles resortes de nuestra vida religiosa. Esto lo deseo verdaderamente para todos, pero especialmente para los Hermanos más jóvenes que quizás no han tenido tanto contacto con las fuentes congregacionales.
Ahondar en este conocimiento nos ha puesto de manifiesto que la presencia de la Sagrada Familia en el Instituto ha tenido épocas diversas en la que han influido tanto la situación histórica como, la edad, la formación recibida y los contextos de apostolado. La publicación del Manual nos ofrece una excelente oportunidad para afianzar nuestra cercanía a la Sagrada Familia. Estoy seguro de que ello facilitará una vida evangélica más radical y ofrecerá una manera efectiva de volver a las fuentes de nuestro propio carisma.
Así pues, estamos llamados a dar en estos años el paso de asimilar y vivir nuestra espiritualidad integrando las etapas del pasado. Vivir la espiritualidad no es sólo rezar algunas oraciones o hacer actividades en honor de la Sagrada Familia. En la espiritualidad la mirada no va tanto en dirección hacia la Sagrada Familia, sino desde el misterio de Nazaret hacia la vida. Como nos decía muy bien el Venerable Hno. Gabriel en la Circular de 1847, “el corazón de un cristiano y especialmente el de un religioso de la Sagrada Familia debería estar a menudo, mejor dicho, siempre, bajo el humilde techo de Nazaret” para desde allí, vivir su relación con Dios, con los demás y con el mundo, tanto en la vida comunitaria como en las actividades de la misión.
Siguiendo este discurso, me permitiré comentar algunas intuiciones que el Hermano Gabriel nos dejó escritas sobre la Sagrada Familia, y que la lectura del Manual me han hecho revivir. Las pongo a tu consideración porque, aunque las hayamos oído muchas veces, para mí tienen un contenido espiritual y emotivo muy fuerte y me parecen ajustadas al tema que te estoy presentando.
¡Veamos! La intuición del Hermano Gabriel a considerar a la Sagrada Familia como «la realización más perfecta en la tierra de la comunidad de amor que es la Santísima Trinidad» (C. 6), nos expresa con evidencia la importancia que nuestros “augustos patronos” tuvieron en el origen de nuestro Instituto. El nombre que llevamos como Institución y otras muchas consideraciones del Fundador sobre el tema lo sostienen sobradamente.
Como ya te he indicado, el motivo de esta carta es animar a todo el Instituto a “volver a la Sagrada Familia” y a superar el proceso de secularización de las últimas décadas que, sin duda, ha dejado secuelas en nuestra manera de entender, comprender y presentarla en nuestros ambientes. En esta superación, el Manual de Espiritualidad recién publicado puede ser un buen instrumento para ello. Desde aquí, aprovecho la oportunidad también para invitar a aquellos Hermanos más preparados en el campo de la reflexión teológica para que, como en esta ocasión, nos sigan ayudando a adentrarnos en el “misterio de Nazaret”.
Pero además de la reflexión teológica no hay que olvidar los aspectos de filiación y de invocación que la relación frecuente con nuestros patronos debe suscitar en nosotros, aspectos que le llevaron a escribir a nuestro Fundador en el Chemin de la Sanctification, que “quien quiera que seáis y en cualquier estado en que os encontréis, tened siempre una grandísima devoción a la Sagrada Familia, invocadla frecuentemente en vuestras necesidades espirituales y materiales; no dejará de ayudaros con tal de que tengáis la intención sincera de imitar las virtudes de las que tan bellos ejemplos os ha dado mientras vivía en la tierra”. Como podemos apreciar, ese sentido de filiación e invocación a la Sagrada Familia provocaban en él un modo de sentir, de proceder, de rezar y de confiar.
En este contexto, me he detenido en volver a repasar la encuesta realizada hace unos años a cada uno de los Hermanos por el Hermano Lino Da Campo sobre la presencia de la Sagrada Familia en nuestra vida. Dicho resultado aporta -al menos a nivel de declaración- un caudal importante de vivencia nazarena aunque a mi modo de ver no se refleje tanto en la vida cotidiana. De cualquier manera, debiéramos comprometernos más para que lo manifestado en la encuesta no parezca tan privado y circunspecto.
Esto nos está obligando a buscar nuevas expresiones de culto y devoción y a manifestarlas en los ambientes donde vivimos. Expresiones que comuniquen mejor las características de nuestra espiritualidad en nuestra vida y misión. Pues en mi opinión, cuanto más nos cobijemos “bajo el techo de Nazaret”, mejor compaginaremos el estar con Dios y en misión de Dios, y mejor lo expresarán también nuestros sentimientos y acciones.
Propongo también a tu reflexión otra declaración con la que el Hermano Gabriel abría el artículo Segundo de las Constituciones y Reglamentos del año 1836. Dice: “la Sociedad de la Sagrada Familia ha sido también fundada para honrar las virtudes de Jesús, María y José y para atraerse su protección durante la vida y en la hora de la muerte”. Si nos preguntáramos por el origen de esta afirmación, tal vez responderíamos que una declaración así sólo podía brotar de una fuerte experiencia de vida espiritual tras haber descubierto el misterio de Cristo en su vida de familia en Nazaret. Una experiencia que con seguridad vivió intensamente en cada una de las dimensiones de su ser y por lo tanto la quiso trasmitir a sus Hermanos.
Es verdad que esa experiencia espiritual implicaba además otros aspectos como su amor a Jesús, el celo por la gloria de Dios, el cuidado de los altares y la educación cristiana de la juventud. Todo lo puso a los pies de la Sagrada Familia como protectora de su obra. Desde esta visión, lleno de audacia y de impulso interior, el Fundador aparece en la Iglesia como una nueva luz y tiene razón de ser su propuesta de educación cristiana para la niñez y la juventud. En mi opinión, la experiencia espiritual del Hermano Gabriel nos debe seguir inspirando en las respuestas que hoy debemos dar a nuestra vocación como Hermanos de la Sagrada Familia.
De nuestro Fundador hemos heredado un carisma espiritual, familiar y nazareno que no debe quedar anclado en el momento de la fundación sino que exige desarrollarlo. Un carisma que requiere creatividad constante y que nos predispone a vivir un modelo familiar y comunitario de iglesia en torno a un único Padre.
En este sentido, el Nuevo Guía en el número 157, nos indica que “el primer paso que Jesucristo dio al venir a este mundo fue un acto de obediencia. La voluntad de su Padre fue para él la primera y única regla. Nunca se apartó de este camino. Su obediencia fue permanente y sin límites. Empezó en la cuna, donde nació, para llegar hasta el Calvario, donde expiró. Durante los treinta años que pasó con María y José, el texto sagrado nada dice de él, salvo que "los estaba sumiso".
Bastarían los comentarios anteriores para percibir la doble imagen de la Sagrada Familia que influye en la visión del Hermano Gabriel. Por una parte, la vida misma de la Sagrada Familia en Nazaret, su vivir en familia, y por otra, la misión de la Sagrada Familia en relación con el cuidado de la vida de Jesús. Ambas se exigen y se complementan. En efecto, en el hogar de Nazaret Dios ocupa el lugar central y esa opción de fe compromete a María y José en el desarrollo de la vida del Hijo de Dios, y al mismo tiempo, los une en el apoyo de un amor recíproco, rico en ternura espiritual y en fidelidad, imprescindible para desarrollar la vida de su hijo. A mi juicio, nuestro Fundador sabe recoger esta doble faceta y las incorpora a la vida religiosa de sus Hermanos.
Por ello mismo, la Sagrada Familia que motivó tanto al Hermano Gabriel debe seguir impregnando nuestra vida y misión y ayudarnos a encontrar a Dios en las experiencias concretas de cada día. Como ves, Hermano, tenemos mucho que ofrecer a la Iglesia y al mundo en el que nos movemos. Si además lo hacemos con nuestro estilo propio de “espíritu de familia” que brota del misterio de Nazaret, dejaremos con toda seguridad huella en nuestras relaciones sociales y eclesiales. A esto estamos llamados.
Ahora bien, como puedes comprender, nuestra relación espiritual con la Sagrada Familia se basa en la imagen que tenemos de Ella en nuestra mente y nuestro corazón y ello origina las diversas sensibilidades en nuestra manera de vivirlo. Para algunos Hermanos es clara fuente de inspiración, para otros daría la sensación de no estar suficientemente integrada en su vida espiritual y no faltan quienes le conceden poca importancia. Quizás nos falte, en mi opinión, mayor convicción y claridad para saber qué es lo que conviene hacer para dar a conocer a la Sagrada Familia y hacerla amar. La publicación del Manual puede ser una ocasión oportuna.
Bien es cierto que no son válidos todos los modos de presentar a la Sagrada Familia, por ello debemos poner especial cuidado en potenciar correctamente el conocimiento, la devoción y el culto que le debemos profesar. Si nuestra manera de acercarnos a la Sagrada Familia no está suficientemente centrada en el Evangelio corre el peligro de generar una imagen distorsionada de ella. Sólo el camino bíblico y la profundización teológica nos pueden ayudar a situarla en el Plan de Dios. Para ello, el estudio y la contemplación de la Palabra nos son imprescindibles.
Por lo tanto, situar a la Sagrada Familia en el lugar que le corresponde conforme a nuestro carisma, nos está pidiendo renovar nuestras ideas, nuestros sentimientos y nuestros comportamientos. La frase del beato Juan Pablo II de que “no solamente tenemos una historia que contar sino una historia que construir” o la del profeta Isaías 51,1 “Mirad la roca de donde fuisteis cortados y la cantera de donde fuisteis extraídos”, nos sugieren volver la vista a nuestros orígenes y ver las posibilidades que tenemos para que nuestra relación con la Sagrada Familia sea nota esencial de nuestro modo de ser y de trabajar en la Iglesia. Estamos, pues, llamados a revivir esta fuerza creadora de espiritualidad nazarena.
Ahora bien, referirnos al carisma es hablar de acción del Espíritu, de docilidad interior y de un estilo coherente de vida, de oración y de trabajo. Así lo entendió el Hermano Gabriel, hombre enormemente preocupado por la evangelización, en una época y en una sociedad marcadas ya por el laicismo. Su pasión evangelizadora fue el núcleo central de todo cuanto vivió y realizó. Desde esa pasión, nuestro Fundador contempla a la Sagrada Familia y en ella alimenta y encauza su impulso pastoral. Situado en esta perspectiva, la imagen de la Sagrada Familia que nos deja en sus escritos adquiere ya unos rasgos específicos de nuestra particular forma de actuar en la Iglesia.
Aspecto que muy bien recoge el Manual al presentar nuestra espiritualidad como inspiradora de nuestro estilo de misión, lo que nos llevaría a preguntarnos por el estilo educativo empleado por la Sagrada Familia al servicio de la vida de Jesús. ¿Tendrían sentido las explicaciones teóricas de nuestra espiritualidad si no nos estimularan en el ejercicio de nuestra misión?
Consecuentemente, nuestra vocación y misión nos deben poner al servicio de la vida, a ejemplo de María y José. Es decir, acompañar la vida especialmente donde se siente amenazada a causa del hambre, de la pobreza, de las guerras, de las enfermedades endémicas o de la destrucción indiscriminada de la naturaleza. Sin olvidar tampoco los ambientes que tratan de ahogarla por el materialismo, el fomento de la pérdida de la sensibilidad espiritual, la ausencia de valores, el relativismo absoluto y tantas otras adicciones que dificultan la dignidad de la persona. ¿Podemos seguir viviendo sin sentirnos afectados?
Los relatos evangélicos de la encarnación, el nacimiento de Jesús, la presentación en el templo, la huida a Egipto y el encuentro de Jesús en medio de los doctores nos pueden ayudar a descubrir algunos rasgos de la Sagrada Familia en misión. En todos ellos María y José están al servicio de la vida y son mediadores de la acción de Dios para que se revele la gloria de Salvador del mundo.
Asimismo, en el ejercicio de nuestra misión aprendemos en la escuela de Nazaret a practicar la misericordia, la corresponsabilidad, la generosidad, la sencillez, la cercanía, la unidad y la solidaridad. Una escuela caracterizada por el “espíritu de familia”, que se preocupa por los demás, genera fraternidad y que se compromete con la misión de la Iglesia. Una escuela que educa para trasmitir el anuncio de la Buena noticia al mundo; una escuela que enseña a leer el Evangelio a la luz del misterio de Nazaret; que presenta a la Sagrada Familia como imagen terrena de la Trinidad; que anuncia a un Dios constituido en comunidad de amor y que proclama una manera de entender la Iglesia como la familia de Dios. También en esta excelente escuela se aprenden las lecciones del silencio, de la vida de familia y del trabajo tan en consonancia con el lema de nuestro Instituto.
El Proyecto Educativo del Instituto, que el Consejo General acaba de aprobar en su nueva versión, sintetiza claramente cómo ejercer en el ámbito escolar, la misión educativa a partir de las intuiciones de nuestra espiritualidad.
Es importante señalar también que nuestro estilo de evangelización se enmarca en la misión familiar y comunitaria de la Iglesia y a ella debemos ofrecer nuestra humilde contribución para el enriquecimiento de la vida cristiana. Este rasgo comunitario, debemos protegerlo y cuidarlo con mucho esmero, en especial, en esta época marcada por el individualismo, por la búsqueda del provecho personal y por la realización de los propios deseos. En la aplicación de la dimensión comunitaria de nuestro carisma nos jugamos la eficacia de nuestra misión. Debemos estar convencidos de que nuestros mayores logros han sido, son y serán siempre, resultado de un trabajo comunitario, en equipo y con sentido de familia.
Una exigencia de comunión en la misión que ya encontramos en el propio Jesús, que comenzó su actividad con una comunidad de discípulos. El Papa Pablo VI nos recordaba que “evangelizar no es para nadie un acto individual y aislado, sino profundamente eclesial y que ningún evangelizador es el dueño absoluto de su acción evangelizadora, sino en comunión con la Iglesia y sus Pastores”.
Acentuando esta comunión en la Iglesia y en nuestro estilo de misión, nuestras Comunidades están llamadas a ser lugares de acogida, de búsqueda de Dios, de solidaridad y de esperanza o en palabras de nuestro Capítulo General, comunidades de presencia, de educación y de corresponsabilidad a ejemplo de la Sagrada Familia de Nazaret.
Por eso, el estilo de presencia de la Sagrada Familia está al servicio de la vida de Jesús. Se trata pues de un estilo de presencia activo y comprometido en la misión. Un estilo que alude a la vida, al trabajo, a la oración, a las relaciones, a la acogida, a la participación, al saber estar, al modo de ser y de acompañar, a la cercanía a la gente y a una opción por Dios. Por ello mismo Dios quiso hacerse presencia humana en el hogar de Nazaret para revelarnos desde allí su misterio y el nuestro.
Así pues, nuestro estilo de presencia al servicio de la vida, como en el caso de la Sagrada Familia, debe procurar acoger, descubrir, acompañar y potenciar todos los brotes de vida que el Espíritu hace surgir en nuestro mundo. Es una presencia física y afectiva. Una presencia que se hace consuelo para los que sufren y horizonte de esperanza para los que no la tienen. Saberse presencia exige fuertes convicciones en la fuerza transformadora del amor y del testimonio, y abrirse cada vez más al mundo de la pobreza para construir una sociedad más humanizada.
También el estilo de educación de la Sagrada Familia atrajo la atención del último Capítulo General con la expresión “Nazaret, escuela de humanidad” y proponía como programa para estos años: “Testimoniar que el carisma nazareno del Hermano Gabriel es un don para la Iglesia y para la sociedad y una oferta de humanidad y humanización a imagen del Hijo de Dios hecho hombre”. Nuestra contribución al proceso de humanización en las distintas culturas, iluminadas por el evangelio, basará su inspiración en la escuela de Nazaret, “donde la Sagrada Familia vivió el misterio de la encarnación y se dejó modelar por la acción del Espíritu”.
Por lo tanto, educar no es solo una actividad hacia fuera. Tener actitud de discípulo es dejarse educar por Dios y por la sabiduría escondida del Evangelio, porque sabemos muy bien que, cuando la Palabra no habita en nosotros, entramos en una situación de flaqueza como los discípulos de Emaús. Por el contrario, cuando la Palabra se nos revela, arde nuestro corazón, adquiere sentido la Eucaristía, la fraternidad es posible y más creativa y nos sentimos disponibles para la misión.
Debemos señalar además que María y José se hacen corresponsables al servicio de la vida de Jesús. Hoy también el Dios de la vida nos invita a cuidar la presencia de Jesús en las Comunidades religiosas, educativas, cristianas, juveniles, Fraternidades Nazarenas y en las familias porque, hoy como ayer, intereses diversos intentan matar al Salvador del mundo y matar también la vida. En esta ayuda el Manual de Espiritualidad nos indica que: “La Sagrada Familia inspira un estilo de colaboración en la misión marcado por la acogida de la Palabra de Dios, la aceptación del designio de salvación, el atento acompañamiento en el crecimiento de cada persona, la corresponsabilidad en las tareas asignadas y la participación en la misión comunitaria con los dones y las cualidades propias de cada uno”.
La corresponsabilidad pues, aparece también en el Proyecto de Vida del Instituto con un relieve particular, que abarca tanto la necesidad de reorganizarnos como la manera de establecer relaciones de confianza y de igualdad entre nosotros. El concepto de autoridad aparece en el horizonte de la corresponsabilidad y pide relaciones complementarias y fluidas entre superiores, hermanos y laicos para potenciar la vida humana y religiosa, para la eficacia de la misión.
Concluyo, pues, Hermano invitándote a descubrir con toda humildad el puesto que debe ocupar la Sagrada Familia en tu vida a imitación de lo que fue para nuestro Venerable Fundador. De igual manera nuestra conformidad con la Sagrada Familia nos debe identificar también con su misión al servicio del Reino. La misión de la Sagrada Familia al servicio de la vida de Jesús debe ser un estímulo para acercarnos al que es la Vida, el Camino y la Verdad.
Roma, 24 de junio de 2011
Hno. Juan Andrés Martos, Superior General
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APROBACION DEL NOMBRE DE LA NUEVA PROVINCIA RELIGIOSA
Estimado Hermano Provincial, Néstor Achigar :
En respuesta a su petición del 13 de abril 2011 relativa al nombre de la nueva Provincia religiosa, fusión de las antiguas Provincias de San José (Uruguay) y de Nuestra Señora de Luján (Argentina), el Consejo General en su reunión del 11 al 18 de abril de 2011 en la Comunidad de la Aguada (Montevideo), aprueba con el nombre de “Nuestra Señora de la Esperanza” la nueva unidad administrativa y religiosa del Instituto en esa región.
Con el deseo de que la Virgen María bajo la advocación de la Esperanza acompañe a todos los miembros de ese sector del Instituto, le saluda atentamente en Jesús, María y José.
Roma 4 - 5 - 2011
H. Juan Andrés Martos Moro
Superior General
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Carta del Superior General Hno. Juan Andrés Martos - Pascua 2011
“Id a decir a mis hermanos que vayan a Galilea: allí me verán” Mt 28,10
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, de las Comunidades Educativas, de las Comunidades Cristianas, Catequistas y amigos de la Familia SaFa:
Con la cita evangélica que encabeza esta carta y que el Venerable Hermano Gabriel Taborin también recogió en algunos de sus escritos, inicio este saludo para desearos una feliz Pascua de Resurrección.
Dicha frase evangélica acentúa además la invitación del último Capítulo General a situarnos en el presente sexenio bajo la óptica de la misión, conscientes de que todo encuentro con el Señor lleva inmediatamente al anuncio de su evangelio. Por esto mismo, María Magdalena después de anunciar que “había visto al Señor y me ha dicho esto” (Jn 20, 18), inicia de madrugada su camino al encuentro de Jesús y lo termina llevando la noticia a los hermanos.
Las lecturas de los evangelios y de los Hechos de los Apóstoles durante este tiempo pascual ponen de manifiesto el movimiento de los discípulos de Jesús, que apresurados y sin miedo, corren para comunicar la experiencia de su encuentro con el Señor resucitado y para decir a sus hermanos que vayan a Galilea, que “allí le verán”. Galilea será pues el punto de arranque de una misión evangelizadora que la Iglesia continúa hasta el presente, porque fue precisamente allí donde los discípulos oyeron las parábolas conmovedoras del Maestro, le vieron curar a los enfermos, acoger a los pobres, tener gestos de perdón y anunciar la salvación.
Desde dicha región, Jesús enviará a sus discípulos para anunciar la buena noticia del evangelio y aquellos hombres y mujeres después de ver a Jesús resucitado, fueron una impactante novedad para los judíos y gentiles de la época por el testimonio de vida que daban y por la valentía con la que hacían el anuncio. Para los discípulos, la Resurrección de Cristo fue una experiencia de misión y es de desear que la celebración de esta Pascua lo sea también para nosotros.
Quizás el empleo de la palabra misión provoque ecos diferentes en los diversos miembros de la Familia Safa; pues soy consciente de la variedad de personas que la formamos y de que no todos nos encontramos en la misma situación de fe. Aún así podemos hacer el esfuerzo de salir de la Galilea de nuestro Nazaret para manifestar en nuestros ambientes un tipo de presencia que anuncie y proclame la sabiduría de la vida que para algunos de nosotros nace de la Resurrección de Cristo.
Presencia de sabiduría que se pueda percibir como un signo del Reino y que aporte acciones concretas que favorezcan al menos lo único que podemos hacer en algunos lugares: la mejora de las relaciones entre las personas y la humanización de la vida. Dicho compromiso nos hará signos de novedad en los ambientes familiares, comunitarios, colegiales, sociales, económicos y políticos en que nos movemos y será manifestación de otra Presencia que nos crea, nos acompaña y nos espera. Ese saber estar nos facilitará descubrir con mirada propia las llamadas de Dios en las diversas situaciones de la vida a las que nos sentimos enviados.
Sentirse enviados pues, supondrá ser portadores de esa sabiduría que da sentido y que se transmite más por lo que somos que por lo que hacemos. Una sabiduría que se ha de manifestar en nuestro quehacer diario revelando a los hombres y mujeres de nuestro tiempo que la vida del hombre tiene sentido. La escena de los discípulos de Emaús es especialmente significativa para clarificar la frontera entre el sentido y el sinsentido en el seguimiento de Jesús.
Desde Galilea, los discípulos fueron enviados a todas las naciones para ser a su vez palabra proclamada. Si la Palabra se hizo carne, la carne deberá hacerse igualmente palabra aunque el mundo sospeche cuando hablamos de las cosas de Dios. Sentirnos enviados supondrá además dar razón del contenido de nuestra fe y saberlo hacer en el momento oportuno.
La aceptación de esta misión como testigos de la Resurrección de Jesús nos compromete a vivir con intensidad:
la encarnación de Cristo, que nos enseña a compartir las alegrías y sufrimientos de la gente, a adoptar un estilo sencillo de vida y a descubrir en la fragilidad de los niños y jóvenes el rostro de Dios;
la Última Cena, que nos enseña a compartir la mesa en torno al Padre, a vivir la fraternidad y a comprometernos en la lucha contra la exclusión;
la Cruz, que nos enseña a ser fieles al amor hasta la muerte, a la donación de cada día como felicidad y a acompañar el dolor de los otros
y la Resurrección de Cristo, que nos enseña que también nosotros podemos resucitar y experimentar una vida nueva.
No basta saber que el Señor ha resucitado, es necesario además que le sintamos presente y le hagamos fuente de vida, de alegría y de paz.
Preguntémonos si hoy nosotros también somos herederos de las enseñanzas de Jesús; si somos novedad de sentido de vida; si nuestra audacia y osadía es visible para los que nos rodean y si corremos apasionadamente como María Magdalena, los apóstoles Juan y Pedro y los discípulos de Emaús para anunciar la Buena Noticia de la Resurrección de Jesús.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
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COMUNICACIÓN Nº 4 - Abril 2011
El Superior General y su Consejo estuvieron en Montevideo entre el 10 y 18 de abril. Motivo de esta grata presencia fue la reunión que por estas fechas acostumbran realizar anualmente, cada vez en un país distinto. El lunes 11 el Superior General participó de la asamblea de AUDEC (Asociación Uruguaya de Educación Católica) logrando así conocer más de cerca los proyectos y desafíos de la educación católica en el Uruguay.
El martes 12, teniendo como sede la casa de Nicaragua donde residió el Consejo por esos días se llevó a cabo el encuentro con el Consejo Provincial. Se compartió con el Consejo la manera positiva que se viene viviendo la unión de las ex Provincias, el trabajo de las Comisiones de Hermanos, especialmente Misión, Formación y Vocaciones y se abordaron temas pendientes como el del fideicomiso con el terreno del Escuti y el del nombre de la Provincia.
Con respecto a este tema, después de manejar varias advocaciones marianas latinoamericanas surgió el de “Virgen de la Esperanza” que luego quedó plasmado en el de Ntra. Sra. de la Esperanza. Conocida es la oración que Mons. Eduardo Pironio compusiera a la Virgen bajo esta advocación y el canto que a menudo se entona en nuestras comunidades para alabar a la madre del Salvador.
En la solicitud dirigida al Consejo General se expresa que “nos ha parecido oportuno buscar un nombre que se corresponda con algunos rasgos de la realidad y la sensibilidad propias de la Iglesia latinoamericana y refleje el talante de esperanza, anhelos y expectativas positivos con que hemos iniciado este camino, aún en medio de nuestras pobrezas y fragilidades”. Se hacía referencia también al documento de Aparecida, Nos. 267-270.
A mediodía de ese día se celebró la Eucaristía en la capilla de la Aguada con la presencia de Hermanos venidos de otras Comunidades, seguida de un almuerzo fraterno.
Al día siguiente miércoles, el Consejo Provincial celebró su reunión mensual ordinaria. Por la mañana escuchó los informes del Administrador Provincial y el Sr. Juan Carlos Olivera quien brindó un claro, panorama a través de precisos cuadros, de la situación general y de los Colegios y Comunidades en el Uruguay.
Se abordaron otros temas vinculados a la Administración y se designaron posibles participantes en el Encuentro de Administradores a realizarse en las Sierras hacia fines de Mayo.
Se trabajó en ajustar los nombramientos para los Equipos de Animación o Áreas en Uruguay. Estos equipos se designan por tres años y son los siguientes 1) Presencia del Venerable Hno. Gabriel; 2) Pastoral Juvenil y Vocacional, 3) Gestión Educativa, 4) Catequesis y 5) Economía. Su cometido es animar el área específica que le corresponda”. El lanzamiento de estos Equipos de hará el 30 de abril en Piedras Blancas en una jornada en la que participará también la Asamblea de Directivos de Uruguay.
La jornada, que reunirá a unas 60 personas, tiene como lema “Apasionados por el Reino, desde Nazaret, anunciamos al Dios Salvador” y tiene como referencia la propuesta de AUDEC para el Bicentenario: “HACIA UN BICENTENARIO EN JUSTICIA Y EDUCACIÓN DE CALIDAD, forjando ciudadanos y cristianos comprometidos con la transformación social”.
El Consejo:
o estudió y aprobó, en algunos casos con observaciones, los Proyectos de Vida Comunitaria de las Comunidades de Hermanos del Noviciado, de Tandil, el Escuti y Santa María.
o designó como encargado de la formación al Hno. Edgardo Bruzzoni que ya se desempeñaba como secretario de la Comisión de Formación.
o propuso los nombres de los Hnos. Mario Fierro y José Mario Dipacce como animadores de la Causa de Beatificación en la Provincia. El Hno. Mario, será nombrado además Vice postulador y seguirá ocupándose del seguimiento del presunto milagro. Se ve conveniente además constituir en el sector de Argentina un equipo de animación de la Causa con personas de las diversas comunidades designadas, previa consulta, por el Consejo.
o nombró como responsables del Boletín Provincial y la página web de la Provincia al Hno. José María de la Fuente, Viviana Casih, Leonor Auad, Rosario Llugáin, Javier Samudio.
o consideró la memoria del Encuentro realizado en San José el 20 de Marzo, entre los Equipos coordinadores de Fraternidades Nazarenas de Uruguay y Argentina. Siguiendo las sugerencias recibidas, vio conveniente que además del coordinador/a general haya en vez de dos, cuatro colaboradores (dos por cada país). En breve comenzarán las consultas para estos nombramientos.
Durante toda la Semana Santa se realizó en un barrio de San José de Mayo y zona de campaña, la misión nazarena con la participación de unos 70/80 jóvenes. El Superior Gral. y algunos miembros del Consejo pudieron visitarlos el domingo 17 escuchando, aún del Hno. Bonaventure y traductor mediante, el mensaje de fe y confianza que dejó contentos por igual tanto a visitantes como visitados.
En Buenos Aires un centenar de jóvenes de varios Colegios de la Parroquia vivieron un triduo santo en solidaridad con visitas a geriátricos, hospitales y al Cottolengo.
El lunes 4 de abril, el Hno. Victorino Lázaro recibió la noticia del fallecimiento de su hermana Delfina. Lo acompañamos con nuestra oración.
El sábado 23 los Hnos. Juan Carlos y Néstor visitaron al papá del Hno. Miguel del Corro que felizmente sigue recuperándose en su casa.
A propósito el Hno. Miguel, el Superior General le ha llamado para comunicarle que en la ultima reunión de Consejo general se formalizó su regreso a Argentina. El mismo será hacia mediados de junio coincidiendo con Pentecostés. Seguramente en este momento experimentará sentimientos encontrados pero eso no quita la validez de la experiencia misionera, espiritual y humana que podrá volcarla en un fecundo apostolado en nuestras Comunidades educativas. Lo recibimos con alegría valorando lo mucho que tiene para dar entre los jóvenes y como testimonio de vida entregada al Señor.
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COMUNICACION Nro. 5
Córdoba, 31 de marzo de 2011
Queridos Hermanos, Fraternidades y Familia SAFA:
Habiendo cumplido ya gran parte de la rápida visita de inicio de año a las Comunidades y aunque falta visitar Salto y Bell Ville (en el Noviciado ya estuve Febrero y en el Escuti y Taborin lo he hecho en la primera quincena de marzo) llego a Vds para compartir lo vivido en estos días de encuentro con los Hermanos, Fraternidades y diversos grupos de la Familia SAFA.
Han sido jornadas intensas, en algunos casos, donde he podido apreciar la multiforme expresión del carisma en la generosidad y la entrega a la misión del Instituto de unos, a la vida fraterna en comunidad o a la oración confiada y el ofrecimiento de las propias limitaciones provenientes de la edad o la enfermedad en otros. Es que nuestras comunidades están llamadas a ser cada día más la obra de Dios y no la de los hombres como lo pedimos en la oración por el Instituto.
Se que hay Hermanos y Comunidades porque así me lo han manifestado, que han acompañado estos días con la oración. Quiero agradecerles particularmente este precioso regalo en el Espíritu. Como decía el Hno. Gabriel la oración fue la piedra angular de nuestro Instituto; y – escribía en el Nuevo Guía - será también una de las columnas más fuertes para sostenerlo. Agradezco también los gestos de acogida fraterna en lo personal y el interés manifestado en las Comunidades de Hermanos, Fraternidades Nazarenas y Familia SAFA por la vida de nuestra nueva familia provincial.
En lo personal está siendo una ocasión de conocer y hacerse conocer, de tomar contacto con nuevas personas, realidades, desafíos y acompañar desde lo que uno puede ofrecer y desde las intuiciones y la propia vivencia del carisma en la Congregación y la Provincia.
Con esta rápida visita recorrida seguir la orientación del Superior General en su última carta sobre autoridad y obediencia donde nos recuerda que en el “ejercer la autoridad como servicio deben tener un puesto particular el diálogo y la escucha; que es necesario escuchar a cada uno de los miembros de la Comunidad porque Dios puede revelar su voluntad a cualquiera de ellos, incluso a los más pequeños”.
Tandil fue el primer destino de la visita. Allí vivimos dos días intensos con los Hermanos de la Cdad compartiendo la oración, las comidas, la entrevista individual en algunos casos y la reunión comunitaria donde dialogamos sobre su Proyecto de Vida. Visitamos las obras del nuevo jardín que se está construyendo en la Quinta San Gabriel, nos reunimos con el Consejo de Dirección y con el grupo de jóvenes, con varios de los cuales habían compartido la Misión de Santa María. Hubo tiempo también para entrevistas con algunas personas que así lo pidieron y un encuentro con miembros de la Fraternidad Nazarena.
En Buenos Aires la tarea principal hacia la Comunidad Educativa fue tomar contacto con los Directivos con los cuales tuvimos varios encuentros individuales y compartimos un almuerzo. También acompañado de alguno de los Hermanos recorrimos las instalaciones del Colegio saludando a diversos grupos o personas en su lugar de trabajo. Tuvimos entrevistas con los Hermanos. Le dimos el abrazo de bienvenida al Hno. Alejandro Salvatierra que regresaba de Filipinas y despedimos al Hno. Miguel del Corro que partía nuevamente hacia su destino misionero con la firme esperanza de una mejoría en la salud de su padre. También aquí hubo reunión de los Hermanos con la Fraternidad Nazarena.
Al día siguiente estaba en la Comunidad Vicente Barreix de Montevideo. Por la mañana visité el Colegio San Juan Bautista y participé de la reunión del Consejo de Dirección, en su sesión semanal ordinaria. Por la tarde viajé a San José donde al día siguiente tendría lugar el encuentro de Hermanos con las Fraternidades Nazarenas.
Desde tempranito, el sábado 19, fueron llegando Hermanos y Fraternidades. El punto de concentración inicial era la Catedral pues allí daría comienzo la jornada nada menos que con la Eucaristía. El celebrante y exalumno P. Jorge Armas ya nos puso en clima para la jornada y dejando de lado cualquier espiritualismo fácil nos presentó a un José que ante situaciones adversas sabe “hacerse cargo”. Nos dejó una pregunta para reflexionar en ese día bajo la mirada de José ¿de qué siento que el Señor me pide que me haga cargo hoy?.
Fue un día de fiesta en todos los sentidos, por el hermoso día que nos tocó, por la presencia generosa de Hermanos y Fraternidades, con la presencia además del Equipo Coordinador y el Hno. asesor de las Fraternidades de Argentina, y porque celebrando a su santo patrono la ciudad se vestía con sus mejores galas para celebrar la 7ª edición de “la fiesta nacional del mate”. La misma culminaría al día siguiente con un gran desfile de caballería gaucha que reuniría cientos de jinetes agrupados en sus respectivas “aparcerías”.
Terminada la celebración en la Catedral-Basílica, nos dirigimos en grupos informales a través de las prolijas peatonales céntricas de la capital maragata, hacia el Colegio, donde debía desarrollarse el resto de la jornada. El Hno. Edgardo supo ponernos en clima de trabajo mediante una precisa presentación del tema del día: “Las sanas tensiones en la vida Ctaria y familiar”. Los participantes siguieron con interés la exposición animada con elementos audiovisuales. Después de un corte Hermanos y Fraternidades entremezclados intercambiaron sobre casos concretos referidos a tensiones en la relación con Dios o inherentes a la relación con los demás, o con la misión o con la edad adulta. Se trataba de identificar que vivía en realidad cada uno y qué orientación se podría sugerir. La misma se confrontaba luego con la “respuesta oficial” dada por el autor. Se llegó así al mediodía, el almuerzo y posterior tiempo libre.
Por la tarde fue el turno de las informaciones. Tomó la palabra Mónica Martínez, coordinadora de las Fraternidades de Argentina para compartir lo trabajado y acordado en la Asamblea de Fraternidades en S. Antonio (Córdoba) en el pasado mes de noviembre. Siguieron algunas informaciones locales y finalmente el Hno. Edgardo presentó la síntesis final. Se detuvo especialmente en la edad madura donde la lucha es entre la generatividad (productividad, creatividad) y estancamiento y en la edad adulta donde la tensión es entre integración, aceptación de la propia historia y aceptación. Espontáneos aplausos siguieron a la exposición que despertó sumo interés en el auditorio. El cierre estuvo a cargo de las Fraternidades y Cdad maragata con un momento de oración donde se destacó la plegaria por el Bicentenario.
Al día siguiente, domingo, por la mañana los equipos coordinadores de las Fraternidades de Uruguay y Argentina, en primera instancia sin los Hnos. asesores, se reunieron para imaginar el camino de futuro ante la nueva realidad de la Provincia. Mientras tanto los Hermanos presentes colaborábamos con el armado y animación de la misa campal en el Parque, sede de los festejos tradicionalistas, transportando la imagen de la Virgen de los 33, el altar, banderas, atril, etc. La misa fue celebrada por el Obispo local Mons. Arturo Fajardo quien al final agradeció vivamente la colaboración de los Hermanos en lo material y en la animación a través del canto, las lecturas y la actuación del Hno. José Mario como maestro de ceremonias.
Nuevamente en el Colegio, los Hnos. asesores y el Provincial se unieron a la reunión de los coordinadores. Allí se hizo memoria del camino recorrido en estos últimos años y algunos desafíos para el próximo trienio. Entre los temas abordados estuvo el del proceso de integración de nuevos miembros a las Fraternidades y la formación permanente en las mismas. En la Guía de Formación de las Fraternidades Nazarenas, Cap III que se encuentra a continuación del Plan de Vida en el “librito gris”, se establecen orientaciones concretas en cuanto la preparación a los compromisos, los procesos de formación, el papel del Animador, el tiempo mínimo que ha de mediar entre el primer compromiso y el definitivo, los objetivos y medios de la formación permanente. Sería interesante que Hermanos y Comunidades que acompañan Fraternidades repasaran estos aspectos. Se habló también del necesario respeto hacia las personas y sus procesos. No parecería conveniente presionar para que hagan sus compromisos. Debería ser una opción libre ya como dice la Guía de Formación “pueden formar parte personas en situaciones diversas”. Finalmente se hicieron sugerencias concretas al Consejo para el nombramiento del próximo equipo coordinador provincial
Por la tarde los visitantes pudieron echar una ojeada a Montevideo y su rambla antes de viajar mientras, en lo personal, permanecía en San José para hablar con algunos miembros de la Comunidad.
El día lunes estuvo dedicado a visitar la Aguada El Colegio vivía un momento particular con la visita del Equipo Auditor para la Certificación en Calidad Educativa por la Universidad Católica Dámaso Antonio Larrañaga de Montevideo y la Fundación Horreum (Bilbao-España). Es la culminación de un trabajo de años y que ha supuesto un gran esfuerzo para directivos y responsables en el tramo final. Me limité a contactos informales en la recorrida por patios y galerías y por la tarde reunión con la Comunidad Hermanos y diálogo con algunos en particular. Por la noche tuvimos una reunión en la Residencia Universitaria con los “tutores”, grupo de voluntarios que se ocupan del acompañamiento de los residentes nuevos.
El martes por la mañana reunión en Administración Provincial. Por la tarde alguna entrevista acordada y por la noche reunión comunitaria en la Cdad. Vicente Barreix con posterior eucaristía en casa y participación de la Fraternidad Nazarena. El miércoles por la mañana fue dedicado a algunas entrevistas, visita a la secretaría de Provincia, partiendo por la tarde para Santa María.
Después de un largo viaje, como dice la canción nazarena, llegué a Santa María en la noche del jueves. Una duda que quería despejar era como me sentiría al cabo del mismo. Me sentía físicamente bien. En realidad con la comodidad que ofrecen hoy los llamados coches-cama (tipo Magic para Uruguay) uno puede dormir, leer (cosa que hice abundante), reflexionar, rezar. Una pequeña contrariedad surgió en la Terminal de Tucumán cuando mientras sacaba el boleto para Sta. María un hábil descuidista se marchó con mi bolso y mochila que lo tenía sobre un carrito. Inútil dar vueltas, preguntar, recorrer. Ropa, algunos libros y CDs, algún kilo de yerba , los candes para Sta María... marchó todo. Menos mal que los infaltables artículos electrónicos como pen, máquina de foto, disco externo portátil, etc, la agenda y otros iban en el bolso que llevaba colgado al hombro. Hum! El Cura de Ars, diría que el diablo mete la cola porque no ha de estar contento por como van las cosas en la visita.
En Sta. María fui cordialmente recibido en la terminal por los Hnos. Alejandro y Fernando quien venía de una jugosa entrevista en la tarde con el Obispo, Mons. Mariano Moreno. Comentamos lo sucedido y rápidamente nos dirigimos a casa que como es costumbre en esta región había quedado abierta, sin llave. Vaya con la diferencia con lo vivido horas antes!
La mañana del viernes 25 fue dedicada totalmente a la reunión comunitaria e intercambio sobre el proyecto de vida de la Comunidad. En diversos momentos luego tuvimos las entrevistas personales.
El sábado 26 por la mañana participamos, teniendo como sede una escuela pública, del retiro para agentes pastorales de la parroquia. Alrededor de 170 personas se hicieron presente superando los cálculos más optimistas y sorprendiendo al P. Juan Antonio Gil OSA, orientador del retiro, llegado hace poco desde Madrid y que desde el día de la Candelaria es el nuevo párroco de Santa María. Las 6 comunidades animadas por los Hermanos en la banda oeste del río Santa María marcaron fuerte presencia.
Por la tarde nos desplazamos con el Hno. Alejandro en su clásica Gilera, hasta la Cdad de S. Carlos Borromeo, unos 10 km al Sur de nuestra casa. Allí tendríamos la Eucaristía seguida de una asamblea parroquial para elegir los miembros del Consejo Pastoral. La capilla funciona en un gran galpón, ex fábrica de conserva de tomates, que después de varios años de estar inutilizado ha sido donado para capilla. En el techo faltan varias chapas que vecinos inescrupulosos se han encargado de llevarse. Una catequista barre el contrapiso y coloca una vieja alfombra sobre la que irá la mesa del altar. Se traen bancos y sillas de los cercanos saloncitos de catequesis. Niños del catecismo, adultos mayores, llenan rápidamente los asientos disponibles. La mitad del centenar de asistentes deben permanecer de pie. Aparece un coro de unos diez chicos y chicas que animan la celebración.
Terminada la misa comienza la asamblea. El Hno. Alejandro pide a todos que tomen asiento. Aclara que los que quieran “tomar gracia” lo harán después de la asamblea. Inútil!. Al sentir “tomar gracia” varias personas adultas, que seguramente no captaron el sentido total de la frase, comienzan a desfilar para tocar a los santos ubicados sobre el altar y se retiran. Tiene lugar después el informe del Consejo saliente seguido de un debate libre. A continuación se procede mediante papeleta manuscrita a la elección de las personas que integrarán el próximo consejo donde se destacan varias de la Fraternidad de esa capilla.
Por la noche, en la Comunidad, la cita es con el grupo juvenil integrado por entre 15 y 20 chicos y chicas. Hamburguesas, momento de reflexión, proyección sobre la misión en Filipinas y finalmente, ya entrada la madrugada, oración en la Capilla.
El domingo por la mañana despedimos al Hno. Fernando León que sale para la reunión de la Comisión de Hermanos de Misión y Equipo vocacional en Montevideo. Por lo mismo decido quedarme un par de días más. Ese domingo era el día elegido para la renovación de los compromisos de 16 personas de las tres Fraternidades nazarenas que corresponden a tres capillas: Las Mojarras, Fuerte Quemado y San Carlos. A las 17 horas las personas involucradas se dan cita en la casa de la Comunidad para tomar el té, compartir las especialidades aportadas por cada una y preparar la celebración leyendo previamente los textos, llenando los formularios de las promesas y recibiendo oportunas las indicaciones para la celebración.
Sobre las 18,30 nos dirigimos la cercana capilla de S. Antonio casi enfrente de nuestra casa. Los compromisos se harán en una celebración de la Palabra, cuidadosamente preparada con distribución de la comunión. Preside la Sra. Teresa, ministra de la comunión y que trabaja en la casa de los Hermanos. El Hno. Alejandro se hace cargo de los cantos. Las personas se comprometen por uno o dos años y dos de ellas para siempre. Están vinculadas a las actividades de las capillas: catequistas, miembros de Caritas, ministros/as de la comunión, integrantes de los Consejos Pastorales. El momento de formulación de los compromisos es seguido con atención por la asamblea y vivido con mucha emoción por los participantes. Fue el broche de oro carismático a la visita cumplida hasta ahora. Hermoso ver el carisma del Hno. Gabriel produciendo frutos de vida en el pueblo de Dios, encarnado entre los pequeños y los humildes.
El lunes es el día de la Comunidad en Santa María. Eso significa levantarse más tarde, hacer la Lectio y algo especial en la mesa, en este caso un asadito al horno. Por la tarde una larga y distendida charla con el Hno. Alejandro y el martes de tarde emprendía el regreso a Córdoba.
En el trayecto me preguntaba , cuál sería la lectura, desde la fe, que podía hacer de esta visita a las casas de la Provincia. Ante todo me venía a la mente aquello de que la misión o “la actividad apostólica es una dimensión esencial de la consagración del Hermano a Dios y al Reino y expresión de amor al prójimo”. (C.115). Mediante el carisma, participamos de la única misión evangelizadora de la Iglesia continuadora de la misión de Jesús, el enviado del Padre, para anunciar la Buena Noticia y la salvación a los hombres.
Para nosotros y en palabras del Hno. Gabriel tiene un sello particular: “Qué misión más hermosa la de educar. Esa misión es la de ustedes, que por vocación están encargados de formar buenos miembros de la familia y de la sociedad y santos para el Cielo” (Circ 8) Es una misión con un estilo que nos viene de contemplar al Verbo Encarnado en Nazaret capaz de generar una santidad “que suscita un nivel de vida más humano incluso en la sociedad terrena”. (LG 40) Por eso es una misión que por ser evangelizadora es humanizadora.
El Espíritu es el principal agente: Él “guía la Iglesia a toda la verdad (cf. Jn 16, 13), la unifica en comunión y ministerio, la provee y gobierna con diversos dones jerárquicos y carismáticos y la embellece con sus frutos” (LG 4). Así lo he podido experimentar en estos días en el contacto con variedad de personas: niños, adolescentes, jóvenes, comunidades de Hermanos, consejos de dirección, fraternidades, grupos de jóvenes, personal docente y no docente, padres, etc.. En la complejidad y riqueza de vida de nuestras comunidades e instituciones se puede reconocer la actuación misteriosa del Espíritu que une, articula, genera pertenencia y hace que esta obra aparezca como realmente de Dios, ya que humanamente resulta difícil encontrarle explicación.
El Espíritu genera comunión. Si el trabajo en grupo, en equipo, la consulta son características de las instituciones de hoy aún a nivel meramente humano, cuanto más debiéramos cultivar en nuestras comunidades una espiritualidad de comunión como lo recordaba el gran Juan Pablo II, en esa especie de testamento espiritual que nos legara en la Novo Millenio Ineunte: “Hacer de la Iglesia la casa y escuela de la comunión es el gran desafío que tenemos ante nosotros en el milenio que comienza, si queremos ser fieles al designio de Dios y responder también a las profundas esperanzas del mundo” (Nº 43).
Durante la visita he oído relatos de Hermanos, de personas con larga trayectoria en nuestras comunidades educativas , relatos vivos de la historia de una obra, de una comunidad que hace referencia a personas, épocas, equipos de trabajo, situaciones, acontecimientos, significativos o no, alegres unos no tanto otros pero que hablan de una continuidad, de una historia de familia carismática, de una historia de salvación.
Para continuar escribiendo esa historia me parece importante rescatar en la línea de la “espiritualidad de comunión” de la que venimos hablando, el espíritu “de cuerpo y de familia” que nos viene del Hno. Gabriel. Podemos estar tentados por el individualismo, las ansias de realización personal, el inmediatismo, el aislamiento que deriva de encerrarse en las propias ideas, de refugiarse en los medios electrónicos y audiovisuales o en un estrecho círculo de relaciones pero que pierde de vista que la misión es esencialmente comunitaria y que vale la pena discernir, buscar y darse o tomarse los tiempos para los acuerdos pensando en el bien común y el futuro de la misión del Instituto como Familia SAFA.
“Es mi experiencia, nos dice el Superior General en la carta ya mencionada, que cuando las decisiones se toman siempre o casi siempre por propia iniciativa sin consultar con nadie, no se está viviendo la obediencia consagrada y lo que es peor, a veces no nos lleva a ningún sitio”.
Para crear la comunión en torno a la vida y la misión del Instituto como una sola Provincia hemos formado las comisiones de Hermanos. Su papel es animar, unir, orientar esfuerzos junto a otros organismos de comunión como son los Comités, las Áreas o Equipos de animación y más a nivel local los Consejos Directivos.
La Comisión de Formación ya trabajó en Passo Fundo y avanzó en propuestas para la formación permanente de los Hermanos y los laicos. En estos días se han reunido en Montevideo la Comisión de Misión y el Equipo Vocacional. La primera está preparando el Encuentro de Hermanos a fines de mayo en Salto. Le hemos pedido también la animación del Encuentro de Directivos y “Áreas” que tendrá lugar el 30 de Abril en Piedras Blancas y que sería como el lanzamiento de estos equipos de animación para el trienio.
En el Consejo hemos hablado de formular un plan de animación vocacional amplio que involucre a toda la Familia SAFA para el trienio. Hay Hermanos designados para acompañar esta animación. En estos días estuvieron reunidos. Pensamos que un plan de esta naturaleza brota del amor a la Congregación y a la Iglesia, de experimentarse discípulo-misionero porque quien no esté enamorado de Jesús difícilmente vibre por anunciarlo. Y a eso también ha de tender: a favorecer el encuentro personal con el Señor, a descubrirlo y a estar dispuesto a seguirlo. Muchas veces este camino los jóvenes comienzan a intuirlo desde el servicio vivido como misión. Tarea del acompañamiento es ayudarlos a profundizar ese conocimiento y amistad con Él. Eso significa orientar la misión en clave de compasión y solidaridad como clave de la Pastoral vocacional.
Hablando de este tema en la visita he encontrado buena disposición en los Hermanos para involucrarse y acompañar. Algunos laicos ven necesario este camino y hay quienes se han ofrecido también para colaborar. En el Consejo hemos hablado de “vocacionar” desde Nazaret pensando en las diversas vocaciones dentro de la Familia SAFA.
Confiamos en que el Equipo Vocacional, valorando todo lo que se viene haciendo (Misiones, Pascua Joven, Hogar y Taller, AJEN, Fin de Semana como en Nazaret…) ayude a generar un proyecto vocacional provincial para el trienio. Pensamos que el encuentro de Hermanos el 27 y 28 de mayo en Salto y el de las Obras de las Vocaciones en Santa Ma. en Julio pueden ser instancias propicias para avanzar en él . Habrá que pensar también en trabajar unidos al Comité Apostólico y el Equipo de Animación de Pastoral Juvenil y Vocacional para involucrar y motivar a toda la Familia SAFA y sus comunidades educativas.
Me pregunto promediando ya la Cuaresma en camino hacia la Pascua y a la luz de estas reflexiones si nuestra conversión no debe ser una conversión a la misión para reencantarnos cada día con nuestra vocación, para ser capaces de renunciar a nuestros hábitos y maneras de hacer, para llevar adelante, colaborar gustoso o acompañar lo que otros hermanos o laicos SAFA hacen en nuestras comunidades en torno a la catequesis, las celebraciones y las realizaciones con jóvenes.
Nuestros pastores en Aparecida nos animan a ello. “No tenemos otra dicha ni otra prioridad que ser instrumentos del Espíritu de Dios, en la Iglesia, para que Jesucristo sea encontrado, amado, adorado, anunciado y comunicado a todos no obstante todas las dificultades y resistencias. Este es el mejor servicio, su servicio, que la Iglesia tiene para ofrecer a las personas y las naciones”. DA 14
Que Jesús, María y José junto al Hno. Gabriel nos animen en este camino como discípulos- misioneros testigos del amor del Padre manifestado en Nazareth.
Hno Néstor Achigar - Provincial
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ENERO DE 2011
Comunidades 2011 - Provincia Uruguay-Argentina
Sagrada Familia (Aguada): Hermanos: Victorino Izquierdo, Juan Bosco Correa, Juan José Hernando, Francisco Godino, José Mario Dipacce, Javier González, Ricardo López
Superior: Hno. José Mario Dipacce.
Administrador: Hno. Ricardo López
Sagrada Familia (San José): Hermanos: Rogelio Dewaele, Ernesto Cordero, Alejandro Salvatierra (En Filipinas hasta Marzo)
Superior: Hno. Rogelio Dewaele
Administrador: Hno. Alejandro Salvatierra
Sagrada Familia (Salto): Hermanos: Manuel Alves, Germán Camarero, Edgardo Bruzzoni
Superior: Hno. Edgardo Bruzzoni
Administrador: Hno. Manuel Alves
San José (Tandil): Hermanos: Adelsio Delfabro, Valentín Vilca, Mario Fierro
Superior: Hno. Valentín Vilca
Administrador: Hno. Mario Fierro
Vicente Barreix (Pocitos): Hermanos: Héctor Da Rosa, José María de la Fuente, Aurelio Arreba
Superior y administrador: Hno. José María de la Fuente
Escuti (Córdoba): Hermanos: Valentín Benedited, Jesús Elvira, Héctor Emilio Almada, Fernando Mallo, Néstor Achigar
Superior: Hno. Néstor Achigar
Vice superior y Administrador: Hno. Fernando Mallo
Escuti (Córdoba) Casa de formación: Hnos: Juan Carlos León, Miguel Vargas, Jorge Ibañez y aspirante Jonathan Guzmán.
Superior: Hno. Juan Carlos León
Administrador: Hno. Jorge Ibañez
Sagrada Familia (Buenos Aires): Hermanos: José Lahoz, Victorino Lázaro, Carlos Raco
Superior: Hno. Carlos Raco
Administrador: Hno. Victorino Lázaro
Santa María (Catamarca): Hermanos: Juan Andrés Acosta, Alejandro Ferrer, Fernando León
Superior: Hno. Fernando León
Administrador: Hno. Juan Andrés Acosta
Noviciado (Passo Fundo): Maestro de Novicios: Hno. Mamerto Sánchez, Vice maestro: Hno. Valcir Rizardo. Novicios: Juan José Gordillo y Gastón Píttaro
Filipinas: Hnos. Edgardo Campos y Miguel del Corro
Roma: Hno. Tarcisio Pateta
El responsable de la animación de la Causa del Fundador se nombrará en la próxima reunión del consejo provincial al igual que el de las Fraternidades Nazarenas.
DICIEMBRE DE 2010
MENSAJE DEL HNO SUPERIOR GENERAL********
“Y no había lugar para ellos en la posada”, Lc 2,7.
FRATELLI DELLA SACRA FAMIGLIA
CASA DI PROCURA GENERALIZIA
Viale Aurelio Saffi, 24 - 00152 ROMA
Tel. 06 581 38 41 Fax 06 588 09 13
Roma, 15 - 12 - 2010
“Y no había lugar para ellos en la posada”, Lc 2,7.
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, de las Comunidades Educativas, de las Comunidades Cristianas, Catequistas y amigos de la Familia SaFa:
El versículo que encabeza el mensaje navideño de este año está tomado del evangelio de San Lucas con el deseo de que todos los miembros de la Familia Safa lo meditemos a la luz del misterio de Nazaret y lo vinculemos a la vida de nuestras Comunidades, Fraternidades y ambientes de misión, especialmente en estos días de Navidad.
Dicho versículo oído repetidamente en los textos de la liturgia navideña tal vez traiga a nuestra memoria imágenes imprecisas de personas indigentes que acampan en las estaciones de tren; de individuos sin hogar ni familia; de familias desestructuradas, de alumnos no integrados, de vagabundos que soportan el frío invierno en las estaciones de metro o en los pasadizos subterráneos de las grandes ciudades; de refugiados que huyen de las guerras; de indocumentados que viven acosados por el miedo; de trabajadores en los talleres clandestinos reducidos al silencio porque son residentes ilegales o de millones de cristianos perseguidos a causa de su fe porque para todos ellos tampoco “hay lugar en nuestros corazones”.
Llama la atención cómo el evangelista Lucas subraya con esa frase la pobreza y la marginación en las que nace el Hijo de Dios para compartir desde el primer momento las condiciones dramáticas de tantos hombres y mujeres de nuestros días que viven en extrema pobreza. ¡Admirable ejemplo de anonadamiento del Hijo de Dios que hace que todos los hombres tengamos abierto el camino de la salvación sin que nadie se sienta excluido!.
Deseo, pues, que la meditación de este significativo versículo, “no había lugar para ellos en la posada” suscite en todos los miembros de la Familia Safa sentimientos de compasión, benevolencia y caridad cristiana ante las necesidades del prójimo particularmente de aquellos que nos son más cercanos en nuestros centros educativos, comunidades religiosas, cristianas, fraternidades y familias. Dejar un lugar para que el Niño Jesús nazca supone sin duda salir de nosotros mismos y de nuestros proyectos para dejarnos interpelar y conmover ante las necesidades ajenas.
Propongo que este itinerario de apertura a las necesidades de pobreza configure nuestro modo individual de pensar, de sentir y de obrar así como el de nuestras Comunidades religiosas, cristianas, educativas, familiares y Fraternidades Nazarenas para que haya siempre un lugar disponible para todo el que nos pide posada física o espiritual y nuestro tiempo y afecto. Este convencimiento nos debe llevar a la experiencia concreta del encuentro con la persona que sufre, que está sola y que demanda un lugar donde poder nacer a una vida más humana. Subyace en este itinerario la convicción y la esperanza firmes de que el mundo puede y tiene la posibilidad de cambiar.
Este sentimiento de compasión exige la entrega incondicional y sin reservas de nosotros mismos pues no seremos evangélicamente compasivos si prestamos servicios parciales, si entregamos algo de lo que nos sobra y si contabilizamos el bien que hacemos, pues tener sentimientos de compasión nos debe llevar a vivir de manera distinta. Dejemos que durante estos días resuene en los ámbitos de nuestra familia Safa la palabra de Jesús: “Sed compasivos como vuestro Padre celestial es compasivo”, sentimiento que cobra una significación especial en la Navidad.
También el Papa Benedicto XVI nos invita a globalizar la solidaridad y la compasión partiendo del amor preferencial por los pobres. Es un compromiso que nos toca de cerca y que nos hace sensibles no sólo a las pobrezas de nuestra casa sino también a ampliar nuestro corazón a la pobreza global del mundo.
Los sentimientos de compasión y de solidaridad adquieren un significado especial contemplando el pesebre donde nace el Hijo de Dios y en el que se nos invita a salir de nuestras fronteras, de nuestros legalismos y de nuestras normas para transitar el camino del Amor de Dios hecho carne. Con la mirada humilde en ese pesebre debemos aprender a mirar a los hombres y al mundo con la ternura y la bondad de Dios y acoger la debilidad del Niño Jesús que nace como posibilidad de una vida nueva. Pero además de contemplación, la celebración de la Navidad pide una conducta coherente con la fe y el compromiso de una existencia vivida conforme al plan salvador de Dios. Este debería ser nuestro primer compromiso de esta Navidad para cuantos vivimos el carisma del Venerable Hermano Gabriel.
¿Qué puedo hacer yo para que en esta Navidad alguien, a mi alrededor, pueda sentirse más persona y encontrar un lugar de acogida más humanitario? ¿Puedo permanecer indiferente ante tantas puertas que se cierran a un Dios que se empeña en nacer entre los hombres? ¿Si María y José estuviesen buscando un hogar para convertirlo en la cuna del Niño Dios, les serviría el mío?
Un año más, Jesús acostado en el pesebre y acompañado de María y de José nos invita a mirarlo en silencio, a contemplarlo con espíritu sosegado y sin las prisas que agitan nuestra vida. Procuremos que al contemplar a Jesús en los belenes de nuestras casas, comunidades y colegios podemos sacar fácilmente tres lecciones básicas. La primera y más importante es descubrir en Jesús recién nacido a nuestro Salvador; la segunda apreciar el encanto de la sencillez y de la sobriedad y la tercera sentir la alegría y el gozo compartidos de la venida de Jesús entre nosotros.
Hagamos presente también a nuestro Venerable Hermano Gabriel en esta felicitación navideña. Si leemos atentamente sus escritos comprobaremos la gran preocupación que tuvo durante su vida para hacerse compasivo con los niños y jóvenes más necesitados de su época esforzándose para que también en ellos el Niño Dios pudiera encontrar un lugar donde nacer.
A toda los miembros de la Familia Safa y especialmente a aquellos que entre nosotros están pasando por alguna dificultad les deseo una feliz Navidad y un próspero Año Nuevo.
H. Juan Andrés Martos Moro, SG
NOVIEMBRE DE 2010
MENSAJE DEL HNO SUPERIOR GENERAL********
"AMARNOS MUTUAMENTE"
FRATELLI DELLA SACRA FAMIGLIA
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Roma, 24 - 11 - 2010
“Recomiendo a todos los Hermanos que se amen mutuamente y se estimulen al bien unos a otros”
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, Comunidades Educativas, Comunidades cristianas, Catequistas y amigos de la familia Safa:
Inicio este saludo, en la conmemoración del ciento cuarenta y seis aniversario de la muerte de nuestro Fundador, poniendo de relieve la siguiente frase que nos dejó en su Testamento Espiritual: “Recomiendo a todos los Hermanos que se amen mutuamente y se estimulen al bien unos a otros”. Esta súplica que hoy se hace extensiva a todos los miembros de la Familia Safa actualiza para nuestras comunidades las palabras de Jesús en el evangelio de San Juan: “Sed uno para que el mundo crea”.
Propongo que esta invitación de “amarnos mutuamente” la hagamos método, práctica y conciencia de vida para construir la comunidad familiar, religiosa, educativa o Fraternidad Nazarena y con mucha humildad hagamos el esfuerzo de caminar desde el Otro, con los otros y hacia los otros, itinerario que nos puede ofrecer una gran fuerza para “estimularnos al bien”. Detengámonos un momento en dicha invitación.
Caminar desde el Otro. Si carecemos de experiencia compartida de Dios y no nos estremecemos ante su misterio difícilmente encontraremos razones para afrontar los problemas de la vida cotidiana y para ofrecer alternativas proféticas en el medio en el que vivimos. Los profetas siempre han sido personas seducidas y apasionadas por Dios, han visto la realidad histórica con los ojos de Dios y han proclamado un mensaje de renovación con la autoridad de su Palabra. ¿Puede llegar a ser profética la familia Safa si no se alimenta de una experiencia de encuentro con Dios y con su Palabra?
Caminar con los otros. Recorramos el camino de Jesús con sus discípulos hacia Jerusalén y descubramos lo que implica caminar con los otros en una constante dinámica de perdón. Ser perdonados y aprender a perdonar. Esta es la clave cristiana a medio camino entre el idealismo (que no tolera la debilidad) y el derrotismo (que renuncia cínicamente a todo ideal). El perdón es la forma concreta en la que expresamos el amor. Si nuestra familia Safa celebra poco o nada la reconciliación con Dios y con los hermanos camina en solitario y deja de ser cristiana.
Caminar hacia el otro. Jesús muestra una extraordinaria e inagotable capacidad de apertura. No solamente se contenta con enseñar sino que va a las personas, entabla relación con ellas y acoge a todos: a los marcados por la desgracia, a los doctores de la Ley como Nicodemo, al oficial romano o al jefe de la sinagoga. Jesús está abierto a todos. Concretemos algunos gestos de apertura y de acogida más urgentes que necesitan hacer nuestras comunidades religiosas, colegiales, cristianas, Fraternidades Nazarenas o nuestras familias.
Estimados hermanos y amigos, hacer referencia durante el mes de noviembre al Venerable Hermano Fundador, recordar sus palabras o leer su vida no debe ser sólo una piadosa devoción ni puede reducirse exclusivamente a un acto de carácter histórico o cultural. Recordar al Hermano Gabriel como Fundador nos remite a su ejemplo, a mantener vivos su recuerdo y a actualizar su presencia entre nosotros. Este es el interés que me mueve en esta ocasión porque nuestra vocación se ha iluminado y concretizado en el encuentro con su persona. Por ello mismo, los miembros de la Familia Safa nos sentimos herederos del carisma del Venerable Hermano Gabriel.
Esta es la gracia y la responsabilidad que nos corresponde. La figura del Hermano Gabriel, su humanidad, su dedicación y su santidad son realidades que hoy nos deben seguir estimulando a trabajar por la extensión del Reino de Dios. Él es quien nos impulsa a fiarnos de la Providencia de Dios, a amar a la Sagrada Familia, a ser familia, a vivir el espíritu de familia, a dedicarnos con todas las fuerzas al servicio de la Iglesia y a ser maestros en el campo educativo. Si se empaña esta referencia al Venerable Hermano Fundador nuestro apostolado se vuelve genérico.
Volver al Fundador es también beber en el manantial de nuestro carisma y de nuestra identidad. Este proceso representa para nosotros no sólo el deseo de fidelidad al pasado, sino también y sobre todo el empeño por encontrar un camino de futuro. Hacer nuestra la pasión espiritual y apostólica del Hermano Gabriel significa hacer nuestra su creatividad apostólica y su pedagógica acción educativa y humanizadora.
En cuanto familia de comunidades, os invito a vivir el proceso de vuelta al Fundador buscando encarnar su profunda espiritualidad, su ansia de comunión y su pasión educativa. Algunas prácticas forman ya parte de nuestras costumbres como es el rezar por la glorificación del Venerable Hermano Gabriel, confiándonos a su intercesión, festejar su fiesta o celebrar la novena mensual.
Estimados Hermanos y amigos, el Venerable Hermano Gabriel se nos hace significativo hoy por su incondicional entrega a Dios y a sus hermanos y por haber descubierto un modo especial de vivir la vida cristiana en la familia de Nazaret. Contemplando el misterio de la vida familiar de Jesús, María y José en Nazaret, el Hermano Gabriel encontró una puerta de entrada al misterio de Dios. Mirando la vida de la Sagrada Familia, el Hermano Gabriel descubrió la humildad de un Dios que, por amor a los hombres, se había hecho como uno de nosotros; descubrió la docilidad y la obediencia, la entrega silenciosa y confiada de María y de José al proyecto salvador de Dios, que les pedía cuidar y proteger la vida del Niño que se les había confiado.
Por todo esto que el Venerable Hermano Gabriel nos invita a entrar en Nazaret y a dejarnos seducir y transformar junto a Jesús, María y José, mediante “el espíritu de familia”, como un modo concreto y profundo de vivir nuestra vida de hijos de Dios y de hermanos en Jesucristo.
Un año más, esta fiesta es una buena oportunidad para reforzar los lazos saludables que nos unen y para estimularnos al bien unos a otros pues donde “hay amor, se encuentra la paz, la satisfacción y todas las virtudes” HG.
Que la celebración de su fiesta produzca frutos de amor y de edificación en toda la familia Safa.
H. Juan Andrés Martos Moro SG
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MENSAJE DEL NUEVO CONSEJO PROVINCIAL*****
Montevideo, 1º de Noviembre de 2010
Queridos miembros de la Familia SAFA:
Comunidades de Hermanos y formandos, Fraternidades Nazarenas, socios y socias de la Asociación de la Sagrada Familia, Directivos, educadores y catequistas SAFA, miembros de los equipos provinciales de animación, jóvenes de nuestras comunidades juveniles, miembros de nuestras comunidades cristianas y catequísticas, queridos amigos y amigas:
Durante los días 30 y 31 de octubre y 1 de noviembre, aniversario del nacimiento de nuestro Fundador, nos hemos encontrado los consejos provinciales de Argentina y Uruguay para dar inicio a la nueva realidad de una única Provincia religiosa. En un clima de fraterna confianza pudimos poner en común los procesos que veníamos viviendo en ambos países, y delineamos juntos los desafíos futuros que deberá asumir el nuevo equipo de gobierno que entrará en funciones a partir de hoy.
Hemos querido comenzar este nuevo camino que se inicia - tiempo de transición, de escucha, de mutuo conocimiento – en un clima de oración y de atención a la Palabra de Dios. De ella hemos recogido la invitación a poder ser entre ustedes una presencia que recuerde la misericordia de Dios en nuestras vidas, la incondicionalidad de su amor para con nosotros, los valores de la humanización y la solidaridad, la primacía de la gracia antes que la de los propios méritos o esfuerzos, la importancia del deseo y la búsqueda del encuentro con Jesús, la invitación a ser y sentirnos “familia”.
Motivados por esta provocación de la Palabra, han sido objeto de nuestra reflexión y ocupación algunos aspectos de la vida de nuestra familia: el acompañamiento de los Hermanos y las comunidades, la formación conjunta de hermanos y laicos, la vida de la pastoral juvenil y vocacional, la presencia y animación en las comunidades educativas, la atención a las presencias misioneras, y otros elementos de organización de la vida y del trabajo para este tiempo.
Confiamos en que la reorganización de este sector del Instituto, que peregrina en América del Sur, pueda ser una oportunidad para revitalizar nuestra vocación y misión como miembros de la Familia del Hermano Gabriel. Sabemos que este proceso requerirá de paciencia, comprensión, de apertura a lo nuevo y de creatividad, del apoyo y la colaboración de todos. Los invitamos a pensar y rezar qué puede aportar cada uno a este camino, desde su lugar, sus dones y la originalidad y los valores de sus comunidades de pertenencia.
Nos ponemos en manos de la Sagrada Familia y del Hermano Gabriel Taborin, y pedimos a nuestro Dios Familia “que nos haga dignos de su llamado y lleve a término en nosotros, con su poder, todo buen propósito y toda acción inspirada en la fe. Así el nombre del Señor Jesús será glorificado en nosotros, y nosotros en él, conforme a la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo. ” ( Cfr. 2 Tes, 1,12)
Un fuerte abrazo en Jesús, María y José
Hnos.Néstor Achigar, Juan Carlos León, Carlos Raco, Edgardo Bruzzoni, José Ma. de la Fuente
DESIGNACION DE AUTORIDADES **********************
FRATELLI DELLA SACRA FAMIGLIA
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Roma, 18 de octubre de 2010
NUEVO CONSEJO PROVINCIAL DESDE EL 1 DE NOVIEMBRE DE 2010
Estimados Hermanos:
Les comunico que el Consejo General, en su reunión de los días 11 a 18 de octubre de 2010, ha realizado la renovación de las autoridades provinciales en el Instituto.
Teniendo en cuenta la consulta previa en conformidad con los artículos 203 y 209 de las Constituciones, la aceptación de los candidatos y algunas consideraciones relativas a mantener un deseado equilibrio en el servicio de la autoridad, el nuevo Consejo Provincial ha quedado constituido por los siguientes Hermanos:
Provincial: Hno. Néstor Achigar.
1°. Consejero: Hno. Juan Carlos León.
2°. Consejero: Hno. Carlos Raco.
3°. Consejero: Hno. Edgardo Bruzzoni.
4°. Consejero Hno. José María de la Fuente.
Este Consejo Provincial entrará en funciones el 1 de noviembre de 2010.
En nombre del Consejo General, agradecemos a los Hermanos que hasta ahora han prestado el servicio de la autoridad en la Provincia y apreciamos en este servicio un signo del amor que Dios tiene a los Hermanos (Cons. 63).
Agradecemos también a todos los Hermanos la responsabilidad manifestada en la consulta y esperamos que continúe manifestándose en la acogida sincera al Hermano Provincial y a sus Consejeros, y en comunión con ellos, realicemos el plan salvífico del Padre en las Comunidades y actividades apostólicas.
Que la Familia de Nazaret inspire y acompañe a quienes han sido designados para ejercer el servicio de la autoridad.
Atentamente en J.M.J.
H. Juan Andrés Martos Moro SG
UNION DE LAS PROVINCIAS **************************
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Aprobación Unión de las Pcias. Ntra. Sra. de Luján y San José
Roma a 20 de abril de 2010
Estimados Hermanos Néstor Achigar y Mamerto Sánchez:
En respuesta a la petición formulada por ustedes y sus respectivos Consejos con fecha del 16 de enero de 2010, el Consejo General, en la reunión celebrada en Passo Fundo (Brasil), del 10 al 19 de abril 2010, aprueba mediante voto deliberativo la unión de las Provincias del Instituto denominadas de San José (Uruguay) y de Nuestra Señora de Luján (Argentina) en una sola Provincia Religiosa. Próximamente se asignará el nombre oficial a esta nueva unidad administrativa y de gobierno.
Atentamente, Hno. Juan Andres Martos Moro S.G.
PASCUA 2010 ************************************************
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Pascua 2010
"Los discípulos hicieron como les había ordenado Jesús y prepararon la Pascua” Mt 26,19)
Estimados Hermanos, miembros de las Fraternidades Nazarenas, de las Comunidades Educativas, de las Comunidades Cristianas, Catequistas y amigos de la Familia SaFa:
Es siempre una gran alegría ponerme en comunicación con vosotros con motivo de las celebraciones que nos recuerdan los misterios del Señor. La cita evangélica que me motiva en esta ocasión la he elegido del evangelio de San Mateo donde dice “Los discípulos hicieron como les había ordenado Jesús y prepararon la Pascua”. La meditación de esta frase me sugiere que también a nosotros Jesús nos puede invitar a preparar una sala donde celebrar la Pascua de este año 2010. Si nos sentimos interpelados, seamos diligentes en el cometido de nuestro encargo a fin de que los invitados y, en especial el Maestro, encuentren la mesa y el local adecuados.
A la luz de esta cita evangélica y teniendo presente las indicaciones del último Capítulo General, pongo a vuestra consideración tres posibles espacios (el mundo, la familia y la comunidad religiosa) a los que podemos ser enviados para preparar en ellos el milagro de la Última Cena. Aceptemos este envío y como educadores de humanidad observemos en ellos las fortalezas y las debilidades que tienen y ofrezcamos nuestra colaboración para mejorar, en lo posible, sus deficiencias. Detengámonos en la decoración de estas tres salas y fijémonos en los elementos que necesitan ser mejorados para una aceptable celebración pascual.
En la sala del mundo se aprecia a primera vista una sociedad marcada por la globalización, los grandes avances tecnológicos, los medios de comunicación, la difusión de la cultura, la mediatización de la comunicación, de la imagen y de la velocidad, la valoración del voluntariado social, el ansia de participación y el compromiso por la paz y la justicia. En este espacio el valor de la persona con sus derechos y responsabilidades va ganando visibilidad y aumentan cada día las manifestaciones de solidaridad. Recordemos aquí las palabras de Jesús: “no he venido para condenar al mundo sino para salvarlo”.
A pesar de estas notas alenta¬doras hay que destacar también en ella la exaltación de lo superficial, la pérdida del sentido de trascendencia, el fuerte individualismo, la falta de solidaridad, el debilitamiento de los tejidos comunitarios, el alto nivel de deshumanización o la persistencia de condiciones inhumanas de vida que hacen que todavía hoy haya muchas personas cuyas necesidades vitales básicas no estén satisfechas.
Preparar en un espacio así la sala para la Cena de Señor requiere ir creando con cuantas personas entramos en contacto, espacios de cercanía y proximidad en las circunstancias de la vida cotidiana. El ejercicio de nuestra vida laboral, los compromisos ciudadanos y de vecindad, las inquietudes políticas y sociales o las actividades y aficiones de tiempo libre son también salas para transmitir con hechos, antes que con palabras, el atractivo y el valor radical de la Resurrección de Cristo. ¿Qué puedo hacer desde mi vocación cristiana para preparar la Pascua en el mundo que me rodea?
En la sala de la familia valoremos la existencia del clima afectivo y relacional donde las personas son aceptadas y queridas como son. En este espacio la familia aparece como una excelente escuela de humanidad y un lugar adecuado para el enriquecimiento de la persona, para la transmisión de la fe y para salud espiritual de una sociedad. Recordamos aquí que Jesús se hizo hombre en el seno de una familia y aceptó la vida familiar como lugar primario de su humanización.
Pero muchas familias pasen por momentos difíciles de soledad, de desamor, de falta de comunicación, de agresiones, de incoherencias, de carencia de medios y de otras muchas situaciones dolorosas que debilitan y empobrecen la vida familiar.
Preparar en este ámbito la sala para la Cena de Señor exige apoyar a la familia, sostenerla y ayudarla a insertarla en la comunidad eclesial. Por ello mismo la familia necesita apoyo de las instituciones, asistencia espiritual y pastoral, colaboración con otras familias y promoción de una cultura familiar que la favorezca. Tengamos presente que la calidad de la vida familiar es responsabilidad de todos sus miembros a fin de crear un marco agradable entre ellos. El trato, la delicadeza, la forma de hablar y de relacionarse, la atención mutua y el gesto complaciente hacen posible que se crezca en edad, en sabiduría y gracia ante Dios y los hombres. ¿Qué puedo hacer desde mi vocación cristiana para preparar la Pascua en mi ambiente familiar?
En el cenáculo de la Comunidad, aparece la vida fraterna como el rasgo más destacado de la vida religiosa en la actualidad y factor de credibilidad de un mensaje cuya fecundidad pasa por la calidad de las relaciones entre los Hermanos. En este escenario se verifica el cotidiano paso del yo al nosotros, de los compromisos personales al compromiso confiado a la Comunidad y de la búsqueda de mis cosas a la búsqueda de las cosas de Cristo. Por todo ella la Comunidad está en construcción continua, que puede crecer y que puede estancarse. Por eso Jesús en su ruego pide por la unidad: “Padre, que todos sean uno”, objetivo para el que se necesita ayuda de Dios y esfuerzo continuo por parte de todos los Hermanos.
Pero a su vez la vida fraterna en comunidad genera grandes demandas que cuando no se alcanzan propician decepciones, frustraciones, sufrimiento y malestar, dificultades que llevan fácilmente a visiones pesimistas que hacen dudar de toda posibilidad de crecimiento y a no valorar suficientemente los logros conseguidos.
Preparar la sala para la Cena de Señor en Comunidad exige entusiasmo para plasmar vitalmente las más radicales exigencias evangélicas de fraternidad, de comunión, de falta de intereses personales, de servicio, de presencia humanitaria y de fidelidad que conducen al encuentro con Dios y con los Hermanos. ¿Qué puedo hacer desde mi vocación de Hermano para preparar la Pascua en mi Comunidad?
Hermanos de Comunidad, hermanos y hermanas de las Fraternidades y amigos de la familia SaFa, en el cenáculo del mundo, de la familia y de nuestra Comunidad asumamos diligentemente ser enviados por Jesús para preparar un año más la sala donde celebrar la Pascua con nosotros. Feliz Pascua de Resurrección 2010
H. Juan Andrés Martos Moro SG
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